El sepelio de la madre del alcalde de Aracataca, Argemira Rueda de Sánchez, fue interrumpido durante una hora por culpa del tren del carbón, el cual paró motores aislando un sector de la población de otro. El carro fúnebre y quienes caminaban el cortejo no pudieron pasar al otro lado de la vía férrea cuando se dirigían al camposanto, no sin antes pasar por la iglesia.
El insólito hecho se presentó este martes en presencia de la gobernadora del Magdalena Rosa Cotes de Zúñiga y de varios integrantes de su equipo de gobierno, quienes vivieron en carne propia las incomodidades que a diario soportan los ‘cataqueros’ por el paso de la máquina y sus vagones 48 veces al día.
'¡Que vaina con este tren, ahora no me deja sepultar a mi madre!', exclamó el alcalde. Acto seguido dijo que 'lo que nos trae es perjuicios, contaminación y muerte'.
'¡No más!, esto era lo que me faltaba, ya es hora que el Gobierno Nacional tome una decisión y escuche el clamor de hace más de 10 años de los habitantes', anotó un ofuscado Pedro Sánchez.
La mandataria departamental – también enojada y confundida – se pronunció enérgicamente. '¡Basta ya!', se le oyó decir en momentos en que intentaba comunicarse con el Ministro de Transporte.
Agregó que 'esto es de todos los días, y esto debe dársele solución ojalá prontamente'. Debido a lo sucedido durante el sepelio de Argemira Rueda de Sánchez, este miércoles, a las nueve de la mañana, se llevara a cabo en Aracataca una reunión con la veeduría ciudadana y las fuerzas vivas y políticas de la región para adoptar una posición determinante al respecto.
'Ojalá y esta problemática la solucione el gobierno del presidente Santos', recalcó el alcalde.
Sacar el tren del carbón del perímetro urbano de Aracataca ha sido una lucha que por más de una década han librado los habitantes de esta comarca quienes sostienen que por culpa de ello han ocurrido muertes de personas que son conducidas en ambulancias al hospital y tardan el viaje al tener que esperar que el tren pase.
