A la clínica Reina Catalina, de Barranquilla, fue trasladada una niña que hace parte de los tres menores que resultaron quemados en horas de la tarde del viernes en una escuela pública de Santa Marta, mientras realizaban con sus maestros un experimento químico en el área de Ciencias Naturales.
Los otros dos pequeños se recuperan en un centro asistencial de la capital del Magdalena.
La infante, de 9 años y estudiante del IED Edgardo Vives Campo, presenta heridas en el 45 por ciento de su cuerpo, pero su estado de salud –de acuerdo con los señalado por su padre, Luis Cárdenas – 'es de cuidado, pero se encuentra estable'. 'Grave, grave no está', dijo.
Manifestó que las quemaduras son de primer y segundo grado y que está intubada para evitar que la tráquea se le cierre.
Indicó que su hija le hizo saber que el accidente se produjo porque un profesor le echó más alcohol a unos químicos que estaban tratando y explotó. Era un experimento a través del cual se buscaba encontrar energía.
Lo que el padre no comprende es cómo se le permite a unos niños a tan corta edad manipular materiales tan peligrosos, pero, peor aún, 'sin protección alguna, pues no tenían una vestimenta adecuada para ello'.
Comentó que a su hija se le quemó el suéter que llevaba puesto y que posiblemente al quitárselo fue que se le quemó el rostro.
Igualmente, dijo no entender el por qué se trabaja en una laboratorio improvisado, puesto que el experimento lo hacían en un mesón del comedor.
'Ojalá y Dios permita que no vuelva a ocurrir algo así. Que esta experiencia sirva para que se tomen los correctivos del caso', expresó Cárdenas.
Alexis Varela, directivo de la secretaría de educación de Santa Marta comunicó que están adelantando las investigaciones pertinentes para establecer responsabilidades. Tarea esta que es compartida con los jefes de núcleos y el equipo de calidad de la educación.