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Alfredo Cruz Esquea Chávez, el aparente dueño del bus en cuyo interior murieron quemados 33 niños y una mujer, fue absuelto de culpas al considerar el Juez Primero Penal del Circuito de Ciénaga que no tuvo participación alguna en la tragedia.

El togado acogió los argumentos del abogado de la defensa, José Jácome Salebe, en el sentido de que su apoderado no tuvo responsabilidad penal en el hecho, pues no hubo intención de que el accidenta ocurriera.

Además, aclaró ante la justicia que no era propietario o dueño del vehículo, como siempre se le notificó, sino que era tenedor y que el conductor lo sacó del parqueadero sin su permiso.

La Fiscalía le había imputado a Esquea el delito de homicidio agravado en calidad de determinador con dolo eventual, sin embargo, en el juicio oral que se realizó en Ciénaga, sin presencia del acusado, se demostró que no tuvo ninguna de esas dos calidades.

'El sentido del fallo fue absolutorio y la sentencia del juez se dictará el 16 de agosto en Ciénaga. Contra él sindicado se levantaron todas las medidas cautelares que existían. Hoy goza de plena libertad, pues la orden de captura fue cancelada', dijo el abogado Jácome.

Antecedentes

 La tragedia de Fundación ocurrió el 18 de mayo del 2014 y Esquea fue capturado el 4 de septiembre de ese mismo año en el estado Zulia, en Venezuela.

Luego de pasar por la Cárcel Modelo, en Barranquilla, por un fallo judicial en Fundación recobró la libertad provisional, previo pago de una caución de un salario mínimo legal vigente en el Banco Agrario, de Aracataca.