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Trágicamente murieron dos agricultores de la Zona Bananera, en el Magdalena, al ser arrollados por el tren, luego de que se quedaran dormidos sobre la vía férrea. Sus cuerpos desmembrados fueron encontrados al amanecer del domingo por campesinos de la región de Palomar, escenario del dantesco episodio.

Las autoridades reportaron que los cadáveres de los labriegos quedaron separados a una distancia de aproximadamente 500 metros, lo que significa que la locomotora arrastró a uno ellos, mientras el otro quedó en el sitio del atropellamiento.

El lugar del siniestro donde ocurrió el fatal suceso es el kilómetro 905 en el trayecto férreo que de Prado Sevilla conduce al corregimiento de Orihueca. 

Aunque en la región no hay testigos de lo que aconteció, se supone que los dos hombres, quienes trabajaban en una misma finca, se encontraban en estado de embriaguez y habrían hecho un alto en su viaje de retorno a casa, por lo que decidieron sentarse sobre los rieles a conversar, con tan mala suerte que fueron vencidos por el sueño.

Vecinos de la zona dijeron que los amigos venían de departir en Guacamayal, en donde estaban participando de las fiestas patronales que se celebran del 19 al 23 de julio.

Las víctimas son Samir Danovis Rivera Bovea, de 20 años, oriundo de Corozal, Sucre, y Juan José Villalba Urdaneta, de 26 años, natural de Ponedera, en el Departamento del Atlántico.

La diligencia de levantamiento de los cadáveres estuvo a cargo del CTI de la Fiscalía General de la Nación.

Van tres

Esta es la tercera víctima del tren en el Magdalena en lo que va corrido del 2018. A comienzo de año fue arrollado por una máquina el jornalero Waldemis Galet Agudelo Cortés, de 20 años.

De acuerdo con la Policía, perdió la vida al quedarse dormido en la vía férrea, tras libar unas copas de licor con unos amigos en el corregimiento de Orihueca.

La otra persona fallecida fue José Rivera Arévalo, de 31 años, de oficio mecánico de maquinaria pesada, quien en febrero pasado fue arrollado en el área de Aracataca por el tren, luego de que el vehículo en que se movilizaba se le apagara justo sobre la vía del ferrocarril.

Herido fue trasladado a un centro asistencial de Santa Marta en donde a los pocos días dejó de existir.