Un libanés de 24 años que participa en el concurso de acordeonero aficionado de la versión 52 del Festival de la Leyenda Vallenata, busca ser el primer rey extranjero de esta categoría.
Se trata de Mahmoud Gebara Issa Merhi, quien a la edad de cuatro años llegó junto con sus padres a Colombia, proveniente del Oriente Medio y se radicó en Maicao, La Guajira, donde se enamoró del folclor vallenato.
'A los tres años me regalaron un darbuka (tambor árabe), fui percusionista desde muy pequeño, a los siete años mi papá me llevaba mucho al parque Simón Bolívar en Maicao (La Guajira), para que viera los conjuntos vallenatos y como me gustaba mucho molestar con la percusión, la música vallenata me llegó al corazón y pude aprender a tocar la caja', dijo el acordeonero libanés.
Tras un año tocando caja, quiso interpretar el acordeón, y sin maestro que le enseñara, su habilidad con el odio lo llevó a aprender escuchando canciones de los juglares vallenatos con un instrumento que le regalaron cuando niño.
'El acordeón lo aprendí a tocar escuchando canciones vallenatas. Una vez un tío me regaló un acordeón y me dijo, mira a ver cómo te va ya que te gusta la música. Cuando murió Kaleth Morales, yo me puse a necear en el acordeón y con la canción de Vivo en el Limbo, saque mi primera nota. La mayoría de las canciones las he aprendido a oído, no he tenido muchos profesores de acordeón', manifestó Mahmoud Issa.
Es su cuarta participación en el Festival Vallenato y actualmente está radicado en la ciudad de Bogotá donde maneja una línea de restaurantes de comida árabe.
En el concurso que se desarrolla en el Coliseo de Ferias Pedro Castro Monsalvo, Mahmoud Issa se presentó con el Paseo ‘El Gallo Negro’ de Alberto Rada y el Merengue ‘El Corregido' del maestro Calixto Ochoa.
'Yo solo le cogí amor al instrumento, a sacarle las notas y hoy en día estamos acá en el Festival Vallenato y con el favor de Dios haremos historia'
Las competencias donde 58 acordeoneros aficionados participan, continúan hoy en la primera ronda con los aires de Puya y Son.
'La competencia está reñida, hay concursantes muy buenos, pero uno tiene que presentarse con la bendición de Dios y luego hacerlo con amor y gusto, para que transmita energía positiva para todos'.