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El Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres (CMGRD), declaró calamidad pública en el Distrito de Santa Marta para reducir el riesgo y responder de manera efectiva a las emergencias que se presenten por inundación y crecientes súbitas en las cuencas de los ríos y quebradas, producto de la temporada de lluvias.

La decisión se tomó tras analizar el informe que presentó el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales – Ideam-, donde se visualizaron los pronósticos de lluvias durante este mes, que se estima será de menor intensidad, pero que de igual forma amerita estar vigilantes.

La Defensa Civil en el Magdalena reportó que en esta capital hay alerta roja por crecientes súbitas y alerta naranja por deslizamientos.

Búsqueda de recursos

Jaime Pérez, jefe de la Oficina para la Gestión del Riesgo y Cambio Climático, Ogricc, explicó que esta declaratoria permitirá gestionar recursos para iniciar procesos de mitigación en las cuencas de los ríos del Distrito y las quebradas que se encuentra en el perímetro de la ciudad, esto con el propósito de disminuir el riesgo, pensando en una posible afectación generada por las fuertes lluvias de la parte alta de la Sierra Nevada.

'El equipo de la Ogricc continuará realizando recorridos por diferentes sectores y corregimientos del Distrito, con el objetivo de monitorear comportamientos e inspeccionar el aumento del caudal de los ríos y quebradas, y garantizar seguridad y bienestar a la comunidad samaria', enfatizó el funcionario.

Desabastecimiento

Durante la reunión del Consejo Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres (CMGRD), se evaluaron los avances en el proceso de asistencia y suministro de agua, por lo que la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta -Essmar E.S.P-presentó informes, en el que se determina que 'en este momento se encuentra en un proceso de captación óptimo del líquido vital'.

'Por tal motivo, no continuará la calamidad pública por desabastecimiento del agua en la ciudad', anotó Pérez.

Esto quiere decir que se inicia el proceso de retorno a la normalidad, al cesar la situación de emergencia y se inicia el proceso de recuperación.