Fabián Obispo, alcalde de Puebloviejo, hizo un llamado a la tolerancia ante el sangriento episodio ocurrido en Tasajera, en donde dos pescadores, Luis Felipe Eacobar y Fausto Ayala Herrera, fueron asesinados y su victimario, Jesús Ibalez Portacio, muerto a piedras, palos y machete, por una turba que hizo justicia con sus manos.
'Fue un acto de irracionalidad que nunca debió ocurrir. Estamos de luto', dijo el mandatario.
Destacó que luego de un consejo de seguridad - con carácter de extraordinario.- se determinó ampliar el pie de fuerza policivo y militar.
Ya en Tasajera hay 15 soldados y se anuncian 20 unidades motorizadas de la Policía que se desplazarán entre Ciénaga y Puebloviejo.
Los habitantes de Tasajera están consternados, porque los pescadores eran personas reconocidas y 'buena gente'.
Además, tenían un parentesco, pues Luis Felipe y Fausto eran cuñados.
Del pistolero que los mató dicen que 'prácticamente era un desconocido'.
Habitantes del pueblo dijeron que se veía esporádicamente y que cada vez que llegaba 'se la pasaba ingiriendo licor'.
El alcalde Fabián Obispo preciso que 'era un individuo que se movía entre Colombia y Venezuela'.
