Por aire y por tierra se combate el incendio forestal que desde hace una semana consume un gran número de hectáreas de pasto y mangle en el Vía Parque Isla de Salamanca.
Dos helicópteros Bambi Bucket, de la Fuerza Aérea, se sumaron este jueves a la operación de extinción, que en tierra es adelantada - desde el primer día de la emergencia - por 51 unidades de bomberos, brigada forestal y oficinas del riesgo del Magdalena y Barranquilla.
Alan Bocanegra, comandante del Cuerpo de Bomberos de Sitionuevo y líder de la tarea, dijo que las aeronaves atacan el fuego en tres frentes (norte, oriental y sur).
Hasta la tarde de este jueves los helicópteros habían realizado 14 descargas de agua cada uno, el equivalente a 12.750 galones.
'Hemos liquidado cinco de los ocho focos del incendio. Nos faltan tres en la zona occidental. Aspiramos a no dejar un solo tronco encendido debido a que este factor es el que más demora la operación, teniendo en cuenta que son incendios subterráneos', anotó.
Dijo que si no se presentan contratiempos, 'a más tardar este viernes estaremos liquidando el incendio'.
El capitán Bocanegra informó como noticia alentadora que el humo ha desaparecido por completo.
Falta de agua
La situación que ha sido diagnosticada por biólogos y ambientalistas como 'preocupante' ha suscitado además un nuevo interrogante ante la 'dificultad para conseguir agua' que han manifestado los bomberos, y que como consecuencia ha generado demoras para apagar las llamas.
En un conversatorio organizado por la Universidad del Norte, expertos desde diferentes enfoques analizaron lo ocurrido en la reserva natural.
Para Sandra Vilardy, doctora en ecología y medio ambiente, la conectividad hidrológica ha sido truncada por intervenciones hidráulicas.
Con imágenes satelitales del Sistema de Información sobre Incendios para la Gestión de Recursos (FIRMS) de la NASA observaron la cercanía de la zona de los incendios con el caño Clarín Viejo. Ante esto Vilardy insistió en que se deben revisar los factores que han impedido el acceso al agua.
Los demás participantes, expertos en Derecho, Ingeniería y Economía, han destacado las dificultades a nivel ecológico, la sostenibilidad del ecosistema, la responsabilidad colectiva y la inminente gravedad que ha ocasionado la huella humana en la reserva natural.
Por otra parte, Luis Carlos Gutiérrez, biólogo investigador y líder del Grupo de Biodiversidad del Caribe Colombiano, considera que los manglares presentes en este ecosistema han sido sujeto durante mucho tiempo de desequilibro y alteraciones que interrumpen su proceso natural.
'Desde extracción de madera para construcción, luego para producción de carbón vegetal y ahora lo queman porque es una barrera natural para los planes de expansión de fincas, carreteras, urbanización, zonas franca y portuarias'.
12 hectáreas
El fuego se concentró inicialmente en el sector Las Albercas, del área protegida y se extendió hasta la Ciénaga Coco Seco.
La conflagración arrasó con aproximadamente 12 hectáreas, de las cuales el 90 por ciento es de pasto o eneas y el 10 por ciento restante de mangle.
El secretario del interior del Magdalena, José Humberto Torres, indicó el Gobierno seccional viene coordinando acciones para controlar y liquidar el incendio, el cual presuntamente es provocado.
Dijo que el sábado y el lunes anterior, con el apoyo de un Bambi, lograron arrojar 8 mil galones de agua, para apagar los focos del incendio.
Destacó que 'se acordó una presencia permanente del componente policial y la intervención social con las 123 personas que habitan en esta zona, la mayoría de ellos pescadores'.