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Los moradores de una casa en el barrio Las Ferias, de Fundación, Magdalena, se llevaron el susto de sus vidas. En medio de la angustia por el desbordamiento del río que inundó la vivienda, se toparon en la sala con un visitante no deseado: una babilla.

No podían creer lo que estaban observando y aseguraban que algo así, solo lo habían visto en películas y documentales internacionales.

'No teman que mientras no lo molesten no hace daño', dijo un vecino que presuroso llegó a la casa guiado por los gritos de una mujer.

'Es un caimán', llegaron a decir algunos. Pero apareció Daniel Fontalvo para despejar las dudas. 'Es una babilla', aseguró.

Y es que para este joven de 18 años y estudiante a distancia de Contaduría, en la Universidad de Pamplona, estos animales les son familiares debido a que al lado de su casa, en el barrio Jardín, está un caño pequeño en donde frecuentemente los observa. Dice que incluso que allí se reproducen.

Fue precisamente este caño el que se desbordó en la parte baja, por eso sostiene que 'por ahí deben haber más'.

Daniel fue quien con su celular tomó la fotografía del inesperado huésped el cual salió de la vivienda por el mismo sitio por donde había ingresado: la puerta.

'Nos asustamos porque nos causó sorpresa ver la babilla en la sala', dijo Daniel, quien estuvo acompañado en el inusual episodio por su hermano Fernando Fontalvo y su amigo Carlos Gámez.