Luego de la investigación contra el capitán, el armador y el agente marítimo del buque Nissi Commander l, fondeado desde el 4 de enero pasado en la bahía de Santa Marta, la Dimar les formuló cargos.
Aunque los detalles de la sanción no han sido divulgados, según el ente marítimo 'por no alterar el debido proceso', se supo que habrían violado las normas de la marina mercante.
'Explicar los cargos no es permitido puesto que la investigación se mantiene y se violaría el debido proceso, con lo cual se incurriría en una conducta antijurídica', recalcó el capitán de fragata Ibis Luna, director de la Dimar.
La decisión se adoptó en virtud del recaudo probatorio, el cual busca establecer las causas que originaron dicha situación.
La motonave con bandera de Mongolia, y cargada con graneles líquidos, llegó a las costas samarias procedente de República Dominicana, donde no se le permitió el atraque. Había zarpado de Panamá.
Los 15 tripulantes denunciaron públicamente que habían sido abandonados por el armador y el agente marítimo.
'El armador dejó de pagarles unos salarios que les debe, al parecer desde el mes de octubre, y por eso se declaró el abandono pero ha estado al tanto y tratando de ponerse al día con los salarios', comentó Luna.
Sin combustible
En un reciente informe, la Dimar reportó que el Nissi Commander I - buque tipo tanquero - carecía de combustible para zarpar.
Se indicó que con base en la protesta que presentó el capitán, de nacionalidad colombiana, y el informe de inspección que ordenó la Capitanía de Puerto, se pretende establecer las circunstancias de tiempo, modo, y lugar en que sucedieron los hechos.
La tripulación la conforman 15 marinos de los cuales 7 son de nacionalidad panameña. El resto son peruanos, ecuatorianos, cubanos, dominicanos y colombianos.
La preocupación de estos marineros, además de estar sin rumbo fijo, la denotan en la precaria situación alimentaria.
Se indicó que solo les llevan a domicilio y en cajas de ícopor, comidas para el almuerzo y la cena.
Igualmente en la parte interna varias secciones presentan un estado antisanitario donde se observan insectos.
Se supo que tras la realización de pruebas se descartaron casos de coronavirus.