Un campesino, al que conocían solamente como Julio, fue descubierto por los vecinos de la finca donde laboraba desde hace unos dos años, ubicada en la vereda Miramar, en el área rural de Ciénaga, Magdalena, en las estribaciones de la Sierra Nevada, con aparentes impactos de bala y en estado de descomposición.
El hombre que, al parecer, procedía de La Loma (Cesar) y tenía una edad aproximada de 55 años, fue hallado hoy miércoles 3 de marzo poco antes de las 10:00 de la mañana, en cercanías al rancho donde vivía en la finca, que no era de su propiedad, y a la que se llega ingresando por una trocha frente al puerto de la Drummond y subiendo durante una hora en camioneta por el cerro.
Informados del hecho, hasta el lugar se desplazaron criminalistas del CTI de la Fiscalía, encargados de la inspección técnica y levantamiento del cadáver, el cual fue trasladado como N. N. hasta la morgue de Santa Marta, por su estado de descomposición, donde esperan pueda ser plenamente identificado por sus huellas dactilares.
Igualmente, se conoció que en la habitación del occiso fueron encontradas vainillas de balas, con las que supuestamente fue asesinado la noche del lunes, último día en que fue visto con vida por los vecinos del sector, quienes al ver que no aparecía iniciaron su búsqueda la mañana de ayer.
'Algunos residentes de las cercanías dijeron haber escuchado disparos la noche del lunes, pero por el deterioro del cuerpo, que también fue comido por animales, no se podía ver con certeza las posibles heridas', agregó uno de los investigadores forenses.
