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El defensor del Pueblo, Carlos Camargo, advirtió un posible riesgo de reclutamiento de niños, niñas y adolescentes por parte de grupos armados ilegales en la Sierra Nevada de Santa Marta. Señaló, que a través del Sistema de Alertas Tempranas de la entidad, se ha evidenciado esta amenaza.

'Esta es una problemática que es de mayor importancia para la Defensoría del Pueblo, y una vez hacemos un llamado a las estructuras armadas al margen de la ley que le hablen claro al país; a todas aquellas organizaciones delictivas que han expresado su voluntad de paz, es importante que no solo digan que tienen intenciones de paz, sino que efectivamente necesitamos ya los colombianos hechos concretos', precisó.

El posible reclutamiento de menores ya había sido advertido por el personero del municipio de Pueblo Bello, en estribaciones de la Sierra, Roberto Marín, quien indicó haber recibido denuncias sobre esa práctica por parte de grupos al margen de la ley en la zona.

'Al parecer existen personas que se están dedicando a reclutar a estos menores para que sigan el camino de las armas', denunció el funcionario.

Señaló que en un consejo de seguridad solicitó a la fuerza pública tomar las medidas pertinentes para evitar este flagelo.

'Esa es una parte de las denuncias que hemos recibido, que el parecer niños pertenecientes a resguardos indígenas, están siendo llevados a las filas armadas' dijo Marín, en Radio Guatapurí, al referirse a la posibilidad de que en resguardos indígenas también se estarían registrando estos hechos.

'Nos preocupa que los niños sean cohibidos para ir a los colegios a prepararse mientras son llevados a la guerra', puntualizó.

A raíz de la situación de orden público en Pueblo Bello, la Defensoría del Pueblo lanzó la alerta temprana No 018-19 advirtiendo la presencia de estructuras criminales en el área de influencia de Pueblo Bello, conminando al Gobierno Nacional, a la fuerza pública y la Alcaldía, adelantar acciones para proteger a las comunidades en los corregimientos de Palmarito, Nuevo Colón, Minas de Iracal y La Honda, así como de los resguardos Businchama y arhuaco de la Sierra y sus respectivas zonas de ampliación y de la cabecera urbana del municipio en las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta.