Samir Orozco Polo, de 27 años, murió cuando era trasladado en una ambulancia hacia Barranquilla después de resultar mutilado tras la explosión de pólvora en una casa ubicada en el barrio La Bonga, en el municipio de Pivijay (Magdalena). La manipulación dejó lesionado a Cristóbal Silva Gutiérrez, de 18 años, quien permanece internado en el Hospital Santander Herrera de ese municipio con varias quemaduras en el cuerpo.
Según el reporte entregado por las autoridades, el incidente ocurrió en la mañana de este jueves en la carrera 9 con calle 8, en momentos en que Cristóbal Silva y Samir Orozco elaboraban castillos y demás fuegos artificiales para comercializarlos en las fiestas patronales, cuando se originó la detonación.
Testigos explicaron que la detonación le amputó la mano a Samir Orozco y le destrozó la pierna izquierda, además de las quemaduras que registró en las córneas, tórax, rostro y cuello, por lo que fue remitido por los especialistas a la Clínica Viva de Barranquilla.
El coronel Jhon Rodríguez Andrade, comandante de la Policía del Magdalena, invitó a la ciudadanía a denunciar los sitios en donde estén manipulando o comercializando esta clase de explosivos, con el fin de prevenir accidentes de mayor envergadura. 'Algunas personas sabían qué se hacía en la casa y nadie informó, la tragedia se pudo evitar. Los invitamos a denunciar los lugares donde expendan o almacenen estos explosivos', explicó el oificial.
