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Tres proyectos, liderados por el Instituto Humboldt y varias universidades colombianas, fueron seleccionados para hacer parte del plan de trabajo del Grupo de Observaciones de la Tierra (GEO).

Este plan de trabajo de Observación de la Tierra busca crear una red 'global de observaciones satelitales' enfocadas en el tema de agricultura, clima, salud, biodiversidad, energía, desastres, desarrollo urbano e infraestructura.

Así, con la información obtenida por medio de los satélites se podrá hacer controles de la situación actual y la degradación de los ecosistemas.

Las propuestas colombianas, que según la investigadora del instituto Humboldt María Cecilia Londoño estas enfocadas al área de la biodiversidad, serán desarrolladas en conjunto con universidades estadounidenses.

El primero de los proyectos será un indicador de degradación de los ecosistemas y constará de la observación de los bosques nacionales a través del satélite Gedi (Global Ecosystem Dynamics Investigation)

Este satélite, ubicado en la Estación Espacial Internacional, observa por medio de sensores activos que permiten incluso realizar los avistamientos entre las nubes. Además, tiene un sistema de rayos laser que dispara hacía las copas de los árboles y permite calcular, de forma detallada, la altura y estructura interna de los mismos.

'las imágenes 3D de la vegetación nos permitirán obtener informes más completos de degradación en referencia a la topografía, disponibilidad de agua y temas de carbono asociado a los bosques', afirmó la investigadora.

Por su parte, otro de los proyectos está enfocado en la toma de 'decisiones sobre la gestión y conservación de la biodiversidad' y se aplicara en la creación de un sistema que permita integrar toda la información recopilada sobre la diversidad biológica del país y que esta esté disponible en el momento de tomas de decisiones que puedan afectar el medio ambiente.

Este sistema estará dividido en cuatro módulos: Estado de conservación, motores de cambio climático, impactos futuros de cambio por uso del suelo e identificación de áreas prioritarias de evaluación.

Finalmente, el último proyecto nacional seleccionado consisten en la creación de un software que evalúe los indicadores de cambios.

'Se pondrá a disposición de practicantes de conservación una caja de herramientas informáticas llamada Wallace, la cual incorpora adelantos recientes en el modelamiento para el desarrollo de mapas de distribución de especies e indicadores del estado de la diversidad biológica, que se nutren del creciente flujo de datos disponibles en repositorios globales y nacionales', explicó Jorge Velásquez, investigador del proyecto.

Las propuestas serán financiadas por la Nasa durante los próximos tres años y, desarrolladas en colaboración con el American Museum of Natural History, el Instituto Max Plank y las universidades City of New York, Pace, Yale, Temple y Northern Arizona.