*EL HERALDO en alianza con la CUC
Mares sagrados, vida salvaje, sensibilidad ambiental y naturaleza pura en su máxima expresión, es lo que puede encontrarse en la Antártida o continente antártico. Posee el tamaño de casi 2 veces Europa y más de dos tercios del agua dulce del mundo se encuentran allí en forma de hielo. Si esta se derritiera podría abastecer a todas las ciudades del mundo por un millón de años.
La capa de hielo llega a tener 4.700 metros de espesor. La Antártida arroja al mar cerca de 4 mil millones de toneladas de hielo al año, en forma de icebergs. En el invierno, el Océano Austral se congela y el hielo puede cubrir hasta 19 millones de km2, pero esta capa que rara vez sobrepasa los 1,5 metros de espesor y está sujeto a los movimientos del mar.
A pesar de tener mucho hielo, es uno de los lugares más secos del planeta. En el interior del continente llueve solo 140 milímetros al año (¡menos que en el desierto del Sahara!). En medio del hielo hay micro bolas de oxígeno que pueden contar la historia de la humanidad. A 10 metros de profundidad, se encuentran vestigios de la bomba atómica de Hiroshima. Es el último reducto de aire 100% puro del globo.
La vegetación que se presenta en algunas zonas reducidas, es la tundra.
¿Cómo se vive?
Vivir en la Antártida significa hacerlo en condiciones extremas. Hay vientos glaciales, mucha nieve y la temperatura sobrepasa los 40ºC en invierno. Existen grandes variaciones en la temperatura del aire. La media anual en una isla puede ser de - 2,8 ° C, y en el Polo Sur Geográfico de -49,0 °C.
Es el único continente del planeta que no tiene población nativa ni permanente. Sus habitantes temporales se cuentan entre mil y 5 mil. El primer ciudadano de la Antártida nació en 1978. Y en la actualidad, cerca de 50 personas pasan el invierno en el Polo Sur.
La Antártida no tiene gobierno ni población indígena y no pertenece a un país específico, pero hay siete naciones que afirman tener soberanía sobre diferentes áreas del continente: Argentina, Australia, Chile, Francia, Noruega, Nueva Zelanda y el Reino Unido.
Además, otros países tienen bases científicas en la Antártida. Por Europa: Alemania, Bulgaria, España, Finlandia, Francia, Italia, Noruega, Polonia, Reino Unido, Rumanía, Rusia, Suecia y Ucrania. Por América: Argentina, Brasil, Chile, Ecuador, Estados Unidos, Perú y Uruguay. Por Asia: China, Corea del Sur, India, Japón y Pakistán. Y por África, Sudáfrica.
¿Cuánto dura el día y la noche en la Antártida?
En el verano, prácticamente no hay noches. En el polo sur geográfico el día dura 6 meses y la noche otros 6 meses. En las áreas cercanas al polo, el sol brilla entre noviembre y abril. En compensación, oscurece en mayo durante 6 meses consecutivos. Esto se debe a que el eje de rotación de la tierra está inclinado con respecto al plano de la órbita del planeta alrededor del sol. Mientras en el Círculo Polar Ártico el sol no se pone hasta seis meses, en el Círculo Polar Antártico es la noche que dura más tiempo. Con la rotación del planeta, el plano se invierte y pasa a ocurrir en el polo Sur, mientras que la noche se prolonga en el Norte.
Al sur del círculo polar antártico hay al menos un día en que no se pone completamente el sol (solsticio de verano) y al menos una noche en que no sale completamente el sol (solsticio de invierno).
En el invierno, a causa del congelamiento del mar, el continente cambia a un tamaño cercano al de África. En este periodo el hielo puede cubrir hasta 19 millones de km2, pero esta capa rara vez sobrepasa los 1,5 m de espesor y está sujeto a los movimientos del mar. Sigue siendo un océano desde el punto de vista geográfico y jurídico.
La rica fauna del continente
Los habitantes más famosos del continente helado son los pingüinos. A ellos los acompañan otras aves, ballenas, focas, peces y crustáceos. Millones de animales viven en esa región al extremo sur del planeta, con condiciones adversas. La razón es la abundancia de comida, principalmente del krill, pequeño crustáceo considerado el plato principal de la Antártida.
Durante el invierno, muchos animales migran hacia el norte y solo vuelven al final de la estación. No lo hacen debido al frío, sino por el congelamiento de la superficie del agua, que impide la búsqueda de alimentos provenientes del mar. El interior del continente es un gran desierto frío, donde solo algunos líquidos y raros musgos viven en las rocas (menos del 1% del área de la Antártida).
Un día en la Antártida
Despertar en el continente blanco, significa soportar temperaturas de cero a menos de 12 grados durante el verano. Implica quedarse resguardado cuando los vientos superan los 60 kilómetros por hora o hay tormentas de nieve. Es acostumbrarse a la ausencia de la luz solar, o de oscuridad total durante 6 meses consecutivos.
'Salimos de la base siempre con una radio, con la indumentaria adecuada y recolectamos datos con drones', cuenta Luana Portz, docente e investigadora del programa de Administración ambiental de la Universidad de la Costa, quien hizo parte de la V Expedición Científica de Colombia a la Antártica 'Almirante Campos' verano austral 2018- 2019, del Programa Antártico Colombiano –PAC
La rutina de los habitantes temporales de la Antártida, como científicos e investigadores, transcurre entre barcos y estaciones o campamentos presentes en el continente, los cuales incluyen bibliotecas, servicios de internet, gimnasia y laboratorios. 'Este es un territorio de paz y ciencia. Los países con bases aquí están obligados a mantener proyectos de investigación', afirma Rogerio Manzolli, investigador de la CUC, quien permaneció durante casi un mes en dicho continente, y para quien fue una oportunidad para observar la vida salvaje, pero también para desarrollar las relaciones internacionales.
Portz y Manzolli conforman el grupo de 7 expertos provenientes de Brasil, España y Colombia, cuyas exploraciones dirigidas por la Agenda Científica Antártica de Colombia 2014-2035, contribuyen a fortalecer el desarrollo de la investigación científica colombiana, incrementando la participación activa y permanente de nuestro país en la Antártica.
El PAC busca además contribuir a la protección y conservación del continente, promover el cambio de estatus de estado adherente a consultivo, dentro del Sistema del Tratado Antártico – STA, y tener derecho a tomar decisiones sobre el futuro de la Antártica. Actualmente, las áreas principales en discusión ante los países miembros se relacionan con paz, investigación, turismo, minería y pesca.