'Las autoridades locales lo han clasificado como oso problemático, lo que autoriza a abatirlo si regresa', esa es la dura sentencia que emitió el Comando Ártico en un comunicado para referirse al animal que varias veces ha atacado una estación en Groenlandia.
De acuerdo con el ejército danés, este lunes el oso polar logró entrar por una ventana mal cerrada a un local de investigación donde se alojaba un equipo de rodaje. En el lugar, el animal mordió en la mano a un hombre, justo antes que lo ahuyentaran con una pistola de alarma.
El documentalista herido tuvo que ser trasladado a Akureyri, Islandia, para ser atendido.
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Luego del suceso, el mamífero volvió a la estación y rompió una ventana de la edificación. Además, se dio a conocer que al oso se le han atribuido cinco incidentes durante un corto periodo.
Especialistas han atribuido estos actos al retroceso de la banquisa, es decir, el terreno de caza para los osos polares.
Cuando esto sucede, los animales se ven obligados a quedarse más tiempo en tierra, esto a su vez provoca problemas de desnutrición que amenazan a la especie.
El suceso se produjo luego de que el noreste de Groenlandia sufriera una ola de calor en la que se batió un récord de temperatura en la regios de 23,4 centígrados.
Según los protectores del medio ambiente, los incidentes con osos polares suelen ser cada vez más frecuentes, ya que ellos se encuentran buscando alimentos.
Un estudio publicado en Nature Climate Change en 2020 indicó que existen 25.000 ejemplares de estos animales característicos del Ártico, los cuales están amenazados de extinción.
