Milán inauguró ayer la Semana de la Moda Masculina 2018, el primer evento de la temporada con más 60 desfiles y 3.000 colecciones y un espacio especial para los jóvenes talentos.
Después de Londres y de la especial Pitti Uomo, que acaba de concluir en la cercana Florencia, se abre Milán, que conserva su calendario dedicado sólo a la moda masculina.
Al contrario de Nueva York, que acaba de anunciar la fusión de las semanas de la moda masculina y femenina en un solo evento que dura diez días (del 5 al 14 de febrero), Milán quiere seguir siendo un punto de referencia para el hombre moderno.
La industria de la moda italiana ha garantizado a lo largo de décadas una continuidad entre la feria florentina Pitti Uomo, cuya 93ª edición cierra sus puertas este viernes, y la semana de la moda lombarda.
'Es un puente ideal, un cruce entre Florencia y Milán, y sería una locura que desapareciera', asegura el presidente de la Cámara de la Moda Italiana, Carlo Capasa.
'Italia es el único país que ofrece tanto sea para hombres como para mujeres y compite con París, Nueva York y Londres, que son eventos diferentes que a su vez completan el panorama mundial de la moda', explicó.
Aproximadamente 60 citas están programadas en una edición que se presenta densa pese a durar tres días.
El desfile inaugural estuvo a cargo de Ermenegildo Zegna, bajo la dirección artística de Alessandro Sartori, quien presentó su colección dentro del claustro renacentista de una universidad milanesa.
Las grandes marcas transalpinas como Emporio Armani y Versace, así como Diesel Black Gold, Marni, Les Hommes o Moschino desfilarán hoy.
La nueva colección de Prada marcará la jornada de mañana, día en que brillarán los modelos también de Dirk Bikkembergs.
El padre de la elegancia italiana, Giorgio Armani y la firma Fendi cerrarán el lunes el certamen.
Varias marcas han elegido los llamados desfiles co-ed, es decir mixtos, en línea con la tendencia de los diseñadores de lanzar colecciones masculinas y femeninas durante el mismo evento. Entre ellas figuran Diesel Black Gold, Neil Barrett y Disquared2.