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El youtuber argentino Brandon Joaquín Maldonado, más conocido en redes como Brandon Lee o El Quechuga, fue acusado en Argentina de liderar una banda que torturaba a supuestos pedófilos.

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Los cinco hombres, entre ellos un menor de edad y el influencer de 29 años, engañaban a estos sujetos haciéndoles creer que eran niños o adolescentes, y los atraían para secuestrarlos y después golpearlos o hacerles otro tipo de castigos.

Las transmisiones de los ataques a supuestos pedófilos eran en vivo, así como las llamadas falsas para hacer que aparecieran y tomar la justicia por sus manos.

Al grupo lo denominaban ‘Caza Violines’, y aseguraba que su actuación era en contra de abusadores sexuales de menores de edad, lo cual era aplaudido por los seguidores del argentino.

Modus operandi

De acuerdo a información difundida por medios argentinos, el líder de la banda e influencer Brandon Lee era el encargado de contactar a los pedófilos, luego se hacía pasar por una joven y los citaba para encontrarse con ellos.

Después, eran llevados a alguno de los apartamentos que la banda alquilaba por pocos días en Buenos Aires, y allí los torturaban indicándoles el delito cometido. Todo lo transmitían en vivo, en plataformas como Instagram.

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En medio de la tortura, el influencer y el resto de los miembros de la banda tomaban los celulares de los hombres secuestrados y publicaban los datos de sus contactos cercanos, haciendo que los internautas cogieran estos números y llamaran a los familiares de los supuestos pedófilos para acosarlos.

Las autoridades indicaron además, que Brandon y sus cómplices manipulaban los chats que tenían los secuestrados, para mostrarlos en la transmisión, y hacerlos quedar antes millones de personas como “depredadores sexuales”.

El youtuber fue denunciado

Una de las víctimas del grupo ajusticiador se atrevió a denunciar públicamente al creador de contenido. Se trata de un hombre de 40 años al que retuvieron durante casi dos horas y golpearon.

Según el demandante, en el apartamento fue recibido por una mujer, quien también haría parte de la banda, y después salieron los otros hombres a torturarlo.

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De acuerdo al medio TN, el youtuber y sus cómplices deberán responder por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada por violencia, pluralidad de autores y coacción.

En caso de que la justicia argentina los condene por ser hallados culpables podrían pagar entre 10 y 25 años de cárcel, “con agravantes adicionales por la participación de un menor”, se lee.

Hasta el momento, los otros supuestos pedófilos no han presentado denuncias en contra del influencer argentino.