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La Fiscalía imputó ayer un total de 620 cargos a Ramón Isaza Arango, el paramilitar más viejo de Colombia, que van desde secuestro, homicidio y reclutamiento de menores hasta falsedad, desaparición forzada y tortura, informaron fuentes judiciales.

Isaza, alias El Viejo y quien nació en la localidad de Sonsón (noroeste) el 30 de septiembre de 1940, fue creador y comandante máximo de las Autodefensas Campesinas del Magdalena Medio (Acmm).

Según las fuentes, solo las matanzas cometidas por sus hombres dejaron más de 1.852 víctimas directas y 2.500 víctimas indirectas.

Además de Isaza, los cargos también afectan a 43 de los mandos de las Acmm igualmente desmovilizados, por su responsabilidad en los mismos 620 hechos de los 776 ya imputados y registrados en los departamentos de Caldas, Antioquia, Cundinamarca y Tolima entre los años 1996 y 2004.

Además de los delitos citados, El Viejo y sus cómplices también deberán responder por falsedad ideológica en documento público, destrucción y apropiación de bienes protegidos y hurto agravado, entre otros.

Isaza y las Acmm, que integraron las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), se desmovilizaron el 7 de febrero de 2006.

En esa fecha, 990 hombres de las Acmm se acogieron a la Ley de Justicia y Paz, marco legal de la desmovilización para militar.

Según distintas fuentes, la organización de El Viejo dejó en más de 30 años una estela de violencia y muerte en vastos territorios de distintas regiones colombianas.

El exjefe paramilitar es uno de los 30 mandos de grupos de las AUC que dejaron las armas dentro del diálogo de paz de esta organización con el Gobierno del presidente Álvaro Uribe (2002-2010), proceso que terminó a mediados de 2006 con la desmovilización de más de 31.000 paramilitares.