Como 'un atentado muy grave contra una candidatura de la oposición' tildó los señalamientos que le hizo ayer la Fiscalía General el líder político samario, Carlos Romero, quien en diálogo con EL HERALDO aseguró que 'jamás he utilizado los cargos públicos para enriquecerme'.
Romero, esposo de la candidata a la presidencia por el izquierdista Polo Democrático, Clara López, llamó la atención sobre 'una cantidad de incongruencias' en las acusaciones del vicefiscal Jorge Fernando Perdomo, quien anunció un interrogatorio el próximo 19 de diciembre al exconcejal de Bogotá porque, según el ente de control penal, habría recibido dinero del investigado contratista Julio Gómez por intervenir a su favor en la extinta Secretaría de Obras Públicas, en el marco del carrusel de la contratación de la capital del país.
Asegura el político samario que 'yo no era concejal en el cuatrienio del llamado carrusel (2008-2012, en la era Samuel Moreno, suspendido en 2011), y me hacen unas acusaciones sobre manejos en la Secretaría de Obras Públicas, que desapareció desde 2005', por lo que advierte que 'son cosas increíbles que están ocurriendo y que me preocupan mucho'.
A la pregunta de qué tan cercano es de Gómez, afirma que 'a Julio Gómez lo vi solamente una vez y creo que no duré ni cinco minutos hablando con él' y asevera, además que 'al señor Emilio Tapia (contratista investigado) nunca lo he conocido, ni a los Nule tampoco'.
Sobre sus supuestas influencias en el despacho distrital mencionado por el ente investigador, asegura que 'nunca he intervenido para favorecer una contratación ni en la Secretaría de Obras Públicas ni en ninguna dependencia del distrito'.
Advierte, así mismo, el exconcejal: 'yo soy una persona honesta, en la carta al fiscal pongo a su disposición mi cuenta bancaria, porque yo soy un hombre modesto, no tengo casa ni apartamento, a pesar que de fui reelegido nueve veces en el Concejo' e invita al organismo penal a que 'examinen para que vean que no he usado los cargos públicos para enriquecerme'.
Denuncia en cambio Romero que ayer al mediodía 'no se había iniciado proceso alguno contra mí en la Fiscalía y ya se había hecho el anuncio', lo que, según él, 'evidencia el grado de improvisación y me da la razón acerca de que todo esto puede estar instrumentalizado para golpear la candidatura de mi esposa', quien fuera, a su vez, secretaria de Gobierno de Moreno y luego lo sucedería en el Palacio de Liévano.
Añade Romero que el aparente interés en desprestigiar la campaña del partido de izquierda, que él señala, 'se ha visto reflejado en los grandes medios de comunicación', porque, concluye, 'aunque el vicefiscal ha mencionado a 10 o 12 personas (15 según el comunicado), con el único que han formado escándalo es conmigo'.
