Bienes de las Farc por un valor aproximado a los 20 mil millones de pesos fueron objeto de extinción de dominio por parte de las Fuerzas Militares y la Fiscalía General de la Nación en el departamento del Caquetá.
La operación Faro, que se realizó durante cuatro días en esta región del país, tenía por objeto expropiar 17 predios, con una extensión aproximada de 4.796 hectáreas, que de acuerdo con las informaciones de inteligencia eran empleadas por las Farc como corredores de movilidad y fuentes de financiación para sus actividades delictivas.
Estas propiedades estuvieron bajo el control de Jorge Briceño, alias El Mono Jojoy, quien durante la época de distensión se habría apropiado de estos terrenos para posteriormente entregarlos, mediante la modalidad de testaferrato, a integrantes de las redes de apoyo a las Farc que tenían la misión de administrar los bienes.
En esta operación de extinción de dominio participaron más de 500 hombres de las Fuerzas Militares y una comisión judicial de la Fiscalía General de la Nación compuesta por 40 miembros de la Policía Judicial del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI).
Julián Quintana, jefe de la Unidad Nacional Contra el Lavado de Activos y la Extinción del Derecho de Dominio, explicó que la acción se realizó en jurisdicción de San Vicente del Caguán en las 17 fincas que usaban los jefes de las Farc durante la zona de distensión.
Estos predios, dijo el funcionario, hacían parte de los terrenos que la guerrilla de las Farc se apropió a través de compras simuladas a precios irrisorios de los dueños originales, los cuales fueron forzados a vender.
Actualmente, los bienes están a nombre de testaferros de baja condición económica y les pagan 200.000 pesos mensuales para que administrarlos.
En esas acciones se llegó incluso hasta las fincas en las cuales entrenaban los guerrilleros. Los predios fueron adquiridos con dineros provenientes del narcotráfico. Los bienes objeto de la operación tienen un valor superior a 14 mil millones de pesos y se espera intervenir un total de fincas avaluadas en 20 mil millones de pesos.
Esta operación correspondió a la primera acción de extinción de dominio contra los bienes de las Farc en la zona que al comienzo fueron apropiados por El Mono Jojoy y Tirofijo pero que actualmente está manejando uno de los cabecillas principales del Bloque Sur conocido como Alias El Paisa.