La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) concedió anoche medidas cautelares al alcalde de Bogotá, Gustavo Petro, quien fue destituido en diciembre pasado por la Procuraduría con el argumento de una mala gestión que llevó a una crisis de basuras en la ciudad, informaron medios locales.
'La Comisión solicita al Gobierno de Colombia que suspenda inmediatamente los efectos de la decisión del 9 de diciembre de 2013, emitida y ratificada por la Procuraduría General de la Nación el 13 de enero de 2014, a fin de garantizar el ejercicio de los derechos políticos del señor Gustavo Francisco Petro Urrego', señala la decisión de la CIDH publicada anoche por diversos medios capitalinos.
Caracol Radio, por ejemplo, citó que la decisión de la CIDH, resumida en 20 puntos, dice que 'en vista de los antecedentes señalados, la CIDH considera que este asunto reúne prima facie (a primera vista) los requisitos de gravedad, urgencia e irreparabilidad contenidos en el artículo 25 de su reglamento'.
Las medidas cautelares habían sido solicitadas por la defensa de Petro desde el pasado 28 de octubre. Se trata de una herramienta para ciudadanos de países que reconocen a la CIDH, y que se otorga cuando se demuestra que están en una situación de gravedad, urgencia e irreparabilidad.
Luego el mandatario señaló a través de su cuenta en Twitter: 'Mañana a las cuatro de la tarde espero a toda la ciudadanía bogotana para festejar este triunfo democrático. Colombia va a cambiar'.
Estuvo perdido. Horas antes de conocerse la decisión de la CIDH, la sala plena del Consejo de Estado, en una decisión que la presidenta de la alta corte aseguró tomada 'totalmente en derecho', tumbó las tutelas que se habían interpuesto en contra de la polémica sanción de la Procuraduría al alcalde Gustavo Petro. La votación fue de 15 a ocho.
La presidenta del Consejo de Estado, María Claudia Rojas, en rueda de prensa dispuesta en la sede del alto tribunal de lo contencioso administrativo, explicó que las tutelas se fallaron en dos grupos, uno se despachó en la mañana y otro en la tarde.
'En un caso se fallaron ocho tutelas que habían sido interpuestas por ciudadanos que no fueron legitimados, porque muchos de ellos habían inscrito su cédula fuera de Bogotá o simplemente mediante notificación de la Registraduría se comprobó que no habían votado en las elecciones para alcalde', dijo.
Las restantes 14 tutelas, añadió, 'fueron falladas revocando la decisión que venía del Tribunal Administrativo de Cundinamarca y que suspendía los efectos del acto del procurador', por lo que, advirtió, 'ese acto ha quedado para ser ejecutado'.
Sobre estos últimos recursos de amparo, la magistrada aseguró que el argumento central fue que 'el derecho a elegir y ser elegido, y el derecho al control político –que invocaban las tutelas–, no pueden ir hasta el punto de cercenar la facultad disciplinaria que tenga el ente encargado'.
En su momento, el mandatario, una vez se enteró de la decisión, hizo un llamado al 'optimismo' y a la 'tranquilidad', para que el Gobierno distrital siga andando: 'Todas las instancias del Distrito con optimismo a mantener y desarrollar los programas de Bogotá Humana. Gobernamos hasta el final'.
Luego, advirtió que 'acuden a la ignominia por su propia debilidad histórica', aunque agradeció 'a los magistrados que fueron capaces de defender el voto ciudadano y la democracia en el Consejo de Estado'.
Sobre este asunto, el burgomaestre, en múltiples oportunidades, ha criticado el hecho de que varios de los magistrados de los altos tribunales sean amigos personales del procurador Alejandro Ordóñez y, además, tengan familiares y amigos trabajando en el Ministerio Público, lo que, según Petro, pone en duda la independencia de las decisiones que lo involucran.
Igualmente, anunció que 'la lucha por la paz y la democracia continúa' y finalmente pidió 'que Bogotá no pierda el optimismo. Tengan la seguridad de que no pasarán. Tranquilidad y fuerza'.
A su vez, el exsecretario de Gobierno de la Alcaldía, Guillermo Jaramillo, dijo a periodistas que ahora 'estamos en manos del presidente Santos (...), pero, especialmente, estamos en manos de la CIDH'.
Por último, Jaramillo le pidió al jefe de Estado 'que valore que en el caso de Petro se violaron los derechos al debido proceso y a elegir y ser elegido. Que no vaya a tomar una decisión rápidamente, porque mañana amanecemos con un alcalde encargado'.