Un tribunal de Madrid condenó hoy al colombiano Bryan Stevan C.A. a 13 años y seis meses de cárcel por arrojar ácido sulfúrico a la cara de una mujer por encargo de su marido, el turco Ozgur D..
Este último fue sentenciado a 18 años y seis meses de prisión por ese delito de lesiones además de los de maltrato, robo y coacciones, agravados por el parentesco, la alevosía y el disfraz.
El suceso ocurrió el 20 de junio de 2012 cuando la víctima, María de los Ángeles R.G., caminaba por una calle de Madrid y Bryan Stevan C.A., cubierto con una gorra y un bigote falso, arrojó a su rostro y a muy corta distancia el líquido corrosivo que llevaba en un recipiente.
Bryan Stevan C.A., cómplice de Ozgur D. y autor material del ataque, fue condenado por los delitos de lesiones y robo, en su caso con las circunstancias agravantes también de alevosía y disfraz.
Ambos deberán indemnizar conjunta y solidariamente a la víctima con 212.000 euros (unos 294.000 dólares) por las secuelas físicas y los daños morales.
En la sentencia, los jueces de la Audiencia Provincial de Madrid consideran probado que Ozgur D. y Bryan Stevan C.A. se conjuraron para agredir con ácido sulfúrico a la mujer del primero cuando éste supo del deseo de su esposa de separarse de él.
Como consecuencia de la agresión, la mujer sufrió una importante quemadura en la cara que le ha dejado graves lesiones estéticas y psicológicas.
Con anterioridad a estos hechos, también por indicación del marido, Bryan Stevan C.A. sorprendió el 29 de mayo de 2012 a María de los Ángeles R.G. cuando ella salía de trabajo, la agarró fuertemente del cuello y le propinó un fuerte golpe en la cabeza, además de sustraerle el bolso.
La resolución considera probado que Ozgur D. contrajo matrimonio en 2007 con María de los Ángeles R.G., pero con el paso del tiempo la relación fue deteriorándose hasta que en abril de 2012 la esposa le pidió el divorcio.
Desde principios de 2012, Ozgur D., que no aceptaba el divorcio, comenzó un proceso de control sobre su mujer y, para ello, la acompañaba con frecuencia e interrogaba a sus amistades sobre una posible relación sentimental de su esposa.
EFE
