Popeye pagó solo 23 años de prisión por haber cumplido las tres quintas partes de la pena, por buen comportamiento y estudio y, además, por haber contado a la justicia gran parte de lo que sabía.
El sicario –quien se entregó en 1992– no habló del exministro Alberto Santofimio como culpable de la muerte de Galán sino hasta abril de 2005, cuando en una ampliación de indagatoria contó que el político le dijo al capo: 'Pablo, mátalo', en medio de una reunión en la finca Marionetas, cerca a la Hacienda Nápoles.
Este testimonio llevó a que un juzgado condenara en 2007 a Santofimio a 24 años de cárcel. El Tribunal Superior de Cundinamarca, al considerar que la declaración había llegado 'tarde y con contradicciones', dejó en libertad al exministro.
En 2011, la Corte Suprema revivió la condena de 24 años. Igual señaló al ex director del DAS, el samario Miguel Maza, de tener nexos con el desaparecido paramilitar Henry Pérez, uno de los autores intelectuales del crimen de Galán y entonces aliado de Escobar. Y reiteró en los despachos que desde el DAS se facilitó el magnicidio. Sobre el avión de Avianca, en que murieron 107 personas con una bomba en noviembre de 1989, buscando matar a César Gaviria, sucesor de Galán.
Declaró Velásquez en 2008, ante la Fiscalía que alias Arete, sicario, llevó la valija con la bomba, contando con la ayuda de Carlos Castaño para transportarla. Popeye dijo, además, que el empresario John Freydell, suegro del automovilista Juan Pablo Montoya, habría aportado dinero para el crimen.