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BOGOTÁ. Luego de que el director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, acusara a guardianes del Inpec de permitir la fuga de Cristopher Chávez Cuéllar de la cárcel de Florencia, las autoridades anunciaron anoche la recaptura de quien es el presunto asesino de cuatro hermanos en el departamento del Caquetá.

‘El Desalmado’ se había fugado a las cuatro de la madrugada de ayer. Había sido capturado el 4 de febrero pasado.

De acuerdo con los reportes iniciales de las autoridades, la aplicación de un plan ‘Candado’ que abarcó los departamentos de Caquetá, Putumayo, Huila y Cauca fue clave para recapturar al acusado, en Curillo, Caquetá, informaron Noticias Caracol y Blu Radio.

‘El Desalmado’ es señalado de haber asesinado a cuatro menores en hechos generados, aparentemente, por un lío de posesión de tierras. El crimen, conocido como la masacre de los niños del Caquetá, tuvo por víctimas a los integrantes de la familia Vanegas Grimaldo, en hechos ocurridos el 4 de febrero pasado en zona rural de Florencia.

Cómo fue la fuga

La fuga de Chávez fue detectada por la guardia carcelaria durante el conteo de internos de la madrugada, informó en un comunicado la Fiscalía General de Colombia, que de inmediato asumió la investigación del caso.

De acuerdo con las primeras indagaciones de las autoridades, al parecer Chávez Cuéllar se voló por los muros del penal, utilizando un cortafrío, para cortar los cables y alambres, aprovechando una falla de luz que se presentó en el establecimiento carcelario.

'Inpec está involucrado'

Sobre este caso, el director de la Policía, general Rodolfo Palomino, manifestó que en la fuga de Cristopher Chávez, hay personal del Instituto Nacional Penitenciario involucrado.

'En lo que sin duda alguna debe interpretarse como un cuadro de corrupción por parte de alguno o algunos de los miembros de la guardia penitenciaria de Las Helicónias de Florencia, permitieron la fuga de este delincuente', afirmó el oficial desde Sincelejo.

'Ellos -agregó- permitieron la fuga de este delincuente, pero tengamos todos la plena seguridad que así como lo capturamos cuando supimos de la autoría de este delincuente como responsable de la muerte de los cuatro menores de edad, igualmente lo estaremos recapturando', anotó el oficial.

Agregó que la Policía Nacional ofrece una recompensa de 50 millones de pesos por información que permita dar con el paradero de ‘el Desalmado’.

Enfatizó en que está seguro que cuando sea recapturado, 'seguramente alguien más tendrá que acompañarlo en la cárcel', haciendo alusión a los posibles cómplices de la fuga.

La Policía había desplegado un operativo por todo el departamento del Caquetá para impedir que Chávez salga de la región.

General Rodolfo Palomino, director de la Policía.

Confésó masacre

Alias ‘el Desalmado’ es investigado por su presunta participación como autor material de la masacre de los cuatro hermanos de la familia Vanegas Grimaldo en hechos ocurridos el pasado 4 de febrero en zona rural de Florencia.

El hombre narró ante la justicia en el momento de ser detenido que asesinaron a los niños al no encontrar en la casa a los padres.

Las cuatro víctimas fueron identificadas como Deinner, Laura Jimena, Juliana y Samuel Vanegas Grimaldo, con edades comprendidas entre los 4 y los 17 años, quienes recibieron disparos en la cabeza cuando se encontraban en una humilde vivienda.

Inpec se defiende

A través de un comunicado, la Unión de Trabajadores Penitenciarios (UTP) rechazó el pronunciamiento del director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, quien acusó a miembros del Inpec de la cárcel Las Heliconias de estar detrás de esta fuga.

'Rechazamos la postura del general Rodolfo Palomino quien apresuradamente culpa a nuestros trabajadores cuando por todos es sabido que la falta de personal del Inpec asciende a 10.000 unidades de custodia y vigilancia y 6.000 empleados administrativos', indica el comunicado.

El Sindicato del Inpec asegura que así como ocurrió esta fuga en esa cárcel también puede ocurrir en otros 137 establecimientos carcelarios, que fueron construidos entre 2004 y 2010, con deficiencias en iluminación, estructurales y sin equipos de seguridad como sensores y cámaras.