La Defensoría del Pueblo respaldó la recomendación hecha ayer por el Ministerio de Salud al Ministerio de Defensa en la que solicita que el Gobierno Nacional suspenda las fumigaciones con glifosato por las afectaciones a la salud que puede ocasionar el uso de dicho químico.
'Luego de una visita en terreno en varios municipios del departamento del Putumayo, con el propósito de recopilar testimonios de las comunidades indígenas allí asentadas respecto a los efectos nocivos del herbicida, la Defensoría del Pueblo respaldó las recomendaciones para suspender dicha estrategia en el marco de la lucha contra las drogas', reseña la Defensoría en un comunicado de prensa.
El informe obtenido en dicha visita fue presentado por la Defensoría a la Corte Constitucional, que había solicitado la visita en virtud de una acción de tutela instaurada por líderes de los resguardos en poblaciones como Orito, Puerto Caicedo y Villagarzón.
Los testimonios recopilados por la Defensoría del Pueblo y remitidos a la Corte Constitucional indican que las fumigaciones fueron permanentes e intensas entre los años 2000 y 2007, que fueron suspendidas en 2008, pero se reanudaron en 2011 y se mantuvieron cada tres meses hasta septiembre del año pasado.
'Señalan los indígenas que como consecuencia de las aspersiones con glifosato, 15 fuentes hídricas resultaron contaminadas, entre ellas 11 quebradas, dos ríos y dos nacimientos de agua en los caños El Cofre y Santa Rosa de Villagarzón', explica el comunicado de la Defensoría.
En materia de afecciones a la salud, las comunidades entrevistadas por la Defensoría señalaron enfermedades dermatológicas, digestivas y respiratorias, siendo frecuentes según ellos, los dolores de cabeza, los casos de intoxicación y síntomas como la diarrea y la fiebre entre los niños.
'Advierten amplias pérdidas en plantaciones de caucho, maíz, cebolla, caña, plátano, yuca y chontaduro, entre otros productos', concluye el comunicado.