Las delegaciones del Gobierno y de las Farc viajaron a Cuba para conversaciones ininterrumpidas durante cuatro meses, tal como lo anunció el presidente Santos.
En esta nueva etapa, las partes contarán con un grupo de expertos de la ONU que los asesorará en el punto último de la agenda de paz entre el Gobierno y las Farc en La Habana: el fin del conflicto.
Aunque no se dieron a conocer los nombres de los representantes del ente multilateral, el anuncio se hace un día después de que el secretario general adjunto de la ONU para Asuntos Políticos, Jeffrey Feltman, se reuniera en Palacio con el presidente Juan Manuel Santos y otros altos funcionarios del Ejecutivo, así como con representantes de los partidos políticos y la sociedad civil.
Acerca de este diálogo reservado entre la ONU y la Casa de Nariño, la portavoz de las Naciones Unidas, Vanina Maestracci, dijo que el objetivo era 'comunicar en nombre del secretario general, Ban Ki-moon, el firme respaldo de Naciones Unidas al proceso de paz y su compromiso de brindar cualquier tipo de apoyo que las partes necesiten para un resultado exitoso'.
Acompañamiento. La solicitud de la mesa de Cuba fue el de un 'acompañamiento en la subcomisión técnica de un delegado del secretario general de Naciones Unidas y un delegado de la presidencia de Unasur -en manos de Uruguay-, con el fin de que contribuya a poner en marcha la discusión sobre el sistema de monitoreo y verificación y a preparar desde ahora su implementación'.
De esta manera, por el lado de la Unión de Naciones Suramericanas, también colaborará en las negociaciones en la isla caribeña el delegado de la presidencia pro tempore de Unasur, el uruguayo José Bayardi, exministro de Defensa y de Trabajo.
Viajan negociadores. La delegación de paz del Gobierno viajó ayer a Cuba para una nueva etapa en el proceso con las Farc que estará marcada por el cambio de algunos miembros de la contraparte rebelde y las renovadas esperanzas que aporta el alto el fuego unilateral que la guerrilla inició el pasado lunes.
Los diálogos que se retomarán a partir de ahora carecerán de ciclos, según anunciaron las partes, con el fin de acelerar el proceso, por lo que también se trabajará sin interrupciones en los dos puntos que faltan: víctimas -que incluye el asunto de la justicia transicional- y desarme y desmovilización de guerrilleros.
Como advirtió Santos la semana pasada, la mesa tiene cuatro meses para producir avances concretos, sobre los cuales el jefe de Estado decidirá si continúan los diálogos o no.
Las partes se vuelven a reunir en medio del cese al fuego unilateral de la guerrilla, que según las Farc durará un mes, que puede extenderse, y según Santos permanecerá durante los cuatro meses de plazo.
Se busca reducir la intensidad del conflicto para facilitar las negociaciones, enturbiadas por la ofensiva militar y las 372 acciones armadas de las Farc.
Desminado
El Ejército y la guerrilla de las Farc reiniciarán hoy su proyecto piloto de desminado humanitario en el municipio de Briceño, departamento de Antioquia, en el que el pasado miércoles murió un soldado que realizaba esa labor, informó el Gobierno.
Las actividades incluyen el desarrollo de procedimientos técnicos y operacionales, así como un plan de reentrenamiento que busca implementar medidas necesarias para garantizar este trabajo con los más altos estándares de calidad y seguridad, según un comunicado de la Dirección de Acción Integral contra Minas.