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Familiares y amigos de Astrid Carolina Méndez Pinilla la despidieron con melancolía y con la incertidumbre acerca de las verdaderas causas de su muerte. La joven de 20 años, según consideran sus allegados, murió como consecuencia de los efectos adversos causados por la vacuna del papiloma humano VPH que le fuera aplicada en el año 2013, cuando tenía 17 y gozaba de un buen estado de salud.

La abogada Mónica León del Río, representante de decenas adolecentes que presuntamente han resultado afectadas por el VPH, anunció que en su denuncia penal por el fallecimiento de Astrid Carolina, solicitó al Instituto Nacional de Medicina Legal practicar una autopsia específica a través de la cual se puedan determinar los daños orgánicos e inflamatorios en las estructuras nerviosas. Asimismo, se lee en el recurso 'se solicitó obtención del tejido nervioso de raíces dorsales y cadena de ganglios, plexos braquiales y lumbosacros con el fin de demostrar desmielinización de las raíces e inflamación asociada'.

Considera la jurista que el fallecimiento de la joven bogotana no es un caso aislado, constituyéndose en el cuarto registrado en el país por la aplicación de la vacuna Gardasil que _asegura_ causó daños neurológicos en Astrid Carolina y efectos dañinos en Karen Durán Cantor de Fusagasugá (Cundinamarca) y Sofía Tovar de El Carmen (Bolívar). Insiste León del Río que las autoridades de salud han sido reticentes a recibir las denuncias públicamente divulgadas por cientos de víctimas en el país.

Agrega la defensora que la conducta lógica del Ministerio de Salud debería ser la de suspender el programa de vacunación hasta que se ejecuten las investigaciones que lleven a determinar por qué en ciertos grupos poblacionales, con posterioridad a la aplicación del VPH, se producen afecciones neurológicas, cardiológicas y en el sistema autoinmune. Mónica León cree que hay un conflicto de intereses del laboratorio fabricante y los médicos e investigadores que apoyan en Colombia el sistema de vacunación.

Ministerio de Salud no asocia muerte al VPH

El subdirector de Enfermedades Transmisibles del Ministerio de Salud, José Fernando Valderrama, calificó como una coincidencia la muerte de Astrid Carolina Méndez, la cual no puede atribuirse al VPH y que por lo tanto la comunidad 'debe tener confianza en el programa de inmunización', porque las vacunas reúnen altos estándares de calidad y son adquiridas directamente a la Organización Mundial de la Salud OMS.

Valderrama aseveró que en el diagnóstico de Astrid Carolina, la EPS que la venía atendiendo, con el concurso de un equipo de neurólogos de la Secretaría de Salud, llegó a la conclusión de que la joven víctima 'desarrolló una neuropatía motora multifocal que derivó en su fallecimiento'. En concepto del funcionario, se está haciendo un seguimiento a la familia porque en la mayoría de los casos denunciados confluyen características genéticas.