Compartir:

Tulio Zuloaga, presidente de Asopartes (Asociación del sector automotriz y sus partes), se encontraba ayer en una reunión a la que fue citado por el Ministerio de Transporte para hablar sobre el impuesto de rodamiento. Aunque dicho encuentro no sorprende, debido a la polémica que desató la publicación de la base gravable de los vehículos para 2016, sí sigue generando confusión para los propietarios de los automotores.

Las dudas sobre si pagar o no giran en torno al aumento de precios que se registra frente a 2015; la cercanía de los plazos en los que, en cada ciudad, se debe cancelar; y al origen de Datasoft Ingeniería Ltda, empresa que realizó el cálculo de la tabla de dichos avalúos.

Para Bogotá, por ejemplo, están hasta el 13 de mayo con un descuento de 10% y hasta el 22 de julio, sin ningún tipo de rebaja. En esta ciudad, el recaudo por este tipo de tributos fue de $489.793 millones en 2015, y la proyección para 2016 tiene una reducción del monto, situándose en $423.862 millones.

'Lo que considero es que en este momento aún hay plazos amplios para pagar. Entonces, en caso de que las personas se den cuenta de que hay una sobrevaloración en el avalúo, es procedente hacer reclamaciones. Sin embargo, no considero que deban apresurarse a pagar debido a la reunión que sostendré con el Ministerio. En un caso hipotético, en el que hubiera devolución, es más difícil ejecutar un proceso de reclamo', manifestó el presidente de Asopartes antes de reunirse con el Ministerio de Transporte.

Sin embargo, esta cartera no se ha pronunciado oficialmente sobre un eventual cambio. Y al contrario, el viceministro Enrique Nates Guerra señaló que 'el Ministerio de Transporte no está creando impuestos. Lo que ha hecho es actualizar las tablas, y en este año en particular, teniendo en cuenta las sugerencias de las secretarías de Hacienda, decidió a través de un proceso de consultoría técnica, que se pudieran desagregar más las líneas de vehículos que existen en el país. Se pasó de 3.000 líneas a 10.000, lo que hoy permiten contar con información más precisa basada en principios de equidad, que hace que el impuesto se base en el valor comercial de los vehículos'.

Y además, indicó que de ese total, solo 3,1% sufrió un aumento por encima de 10% frente al año 2014, 'el resto del universo está por debajo de 10% o mantuvo su valor, y en algunos casos incluso, hubo reducciones', enfatizó.

No obstante, Zuluaga manifestó que el incremento de los impuestos ha sido alto. 'A las personas que les subió el impuesto de forma disparada, en gamas media, oscila entre 30% y 40%. Pero hay vehículos de gama alta, en los que el alza está entre 80% y 100%. Esto sin duda afecta el bolsillo del consumidor porque no solo se está pagando más, sino que se está valorizando de una forma que no es correcta', dijo.

Y agregó que la preocupación también es futura por lo que seguirá pasando en 2017 con el aumento.

En un sondeo hecho por LR, en el que se tuvo en cuenta las bases gravables de 2015 y 2016 de algunos de los vehículos más vendidos el año pasado, encontró que hay aumentos que oscilan entre $3 millones y hasta más de $10 millones, y que comparados con los precios comerciales, hay diferencias mínimas y máximas.

Por ejemplo, un carro de gama media de la marca Nissan, modelo March, tiene un valor comercial de $25,7 millones, según la Revista Motor. Con la base gravable de 2015 se ubicaba en $20 millones, y con la que rige para 2016, es de $23,3 millones. Sin embargo, uno de la misma gama, de la marca Renault, modelo Sandero AT, en 2015 estuvo en $28 millones y para 2016 en $39,1 millones, cuando su valor comercial es de $30,8 millones.

Interrogantes sobre el origen de la consultora

El origen de la empresa Datasoft Ingeniería Ltda que realizó el cálculo de la tabla de avalúos también ha generado dudas. Por un lado, Tulio Zuloaga, presidente de Asopartes, manifestó que la razón social de la firma cambió hace unos meses 'su objetivo social era vender softwares y ahora son una empresa de investigación'. Sin embargo, el viceministro de Transporte Enrique Nates, comentó que el proceso se hizo 'bajo preceptos técnicos, con una consultoría que se contrató en debida forma, mediante concurso de méritos y teniendo en cuenta los preceptos legales que se requieren'

*Servicio informativo La República