En medio del primer debate en sesiones extraordinarias de la reforma a la Ley de Orden Público, el senador del Centro Democrático, José Obdulio Gaviria, dijo que el abogado de las Farc, Enrique Santiago, es 'el perseguidor internacional del uribismo', ante las denuncias que ha hecho en diferentes escenarios el jurista contra el expresidente Álvaro Uribe.
'Enrique Santiago es el agente de la persecución judicial internacional contra las figuras de la política colombiana que obligaron a las Farc a rebelarse. Aquí tengo el dosier de Álvaro Uribe, expresidente colombiano, ante la Corte Internacional y el autor es el asesor de las Farc, convertido por acuerdo también en asesor del Gobierno, el señor Enrique Santiago Romero. Es conveniente repasar la hoja de vida del expresidente colombiano para comprender sus obvios temores a acabar compareciendo ante la Corte Penal Internacional', advirtió.
Agregó el parlamentario uribista, en la discusión que sostienen las comisiones primeras conjuntas de Senado y Cámara sobre la creación de las zonas de ubicación para los desmovilizados de las Farc y las facultades al presidente para suspender las órdenes de captura de toda la tropa subversiva, que 'las Farc no se van a someter a la justicia sino que van a pasar rápidamente a conducir este país con las mayorías de este Congreso'.
Entre tanto, el ponente del proyecto, que tiene mensaje de urgencia del Gobierno, el senador de La U, Roosvelt Rodríguez, que 'el compromiso era que no podía despejarse para dialogar sino sobre demostraciones claras de querer dejar las armas. Y esas condiciones ahora están dadas'.
A su vez, el ponente de la célula legislativa de asuntos constitucionales de la cámara baja, el representante por Bolívar del Partido Liberal, Silvio Carrasquilla, explicó que 'la suspensión de las órdenes de captura debe ser no sólo para los representantes y voceros sino también para la tropa de las Farc', y agregó: 'esa suspensión no eximirá a los guerrilleros de la responsabilidad penal, pero posibilitará la paz'.
A su vez, el representante Germán Navas Tálero, del Polo Democrático, consideró: 'el precio de la paz no importa, porque este país nunca le puso precio a la guerra'.
A su turno, el senador barranquillero de La U, Armandi Benedetti, advirtió, en defensa del Plebiscito como mecanismo de refrendación de los acuerdos de la mesa de Cuba con las Farc, que 'a la gente que habla de Constituyente no le gusta la paz. La Constituyente llevaría al menos dos años y medio, si nos va bien'.
Señaló además el legislador ofucialista: 'los que no han sufrido la guerra son los que menos quieren perdonar; en cambio las víctimas sí quieren la paz'.
No obstante, el senador del Centro Democrático, Alfredo Rangel, aseveró que 'ese despeje que se propone aquí puede dejar la población civil al arbitrio de la guerrilla'.