El procurador nacional, Alejandro Ordóñez Maldonado, aseguró que se 'inició la investigación disciplinaria', sobre la crisis energética que atraviesa el país para conocer si 'la eventual imprevisión de las autoridades públicas y que tienen competencia en esta materia referida a la escasez de gas, han generado posible racionamiento'.
Ordóñez agregó que hay tres líneas de investigación, la primera es para saber 'exactamente cuál fue la destinación que se hizo respecto al cargo de confiabilidad, otra si existió o no imprevisión en materia de escasez de gas y si existieron o no irregularidades en la determinación del precio de escasez'.
Precisó que la Procuraduría 'advirtió' desde el año anterior que se podían haber tomado medidas y que las que se tomaron fueron tardías. 'Siempre existieron voces en el sector que las reclamaban (medidas) para impedir el racionamiento', enfatizó.
El procurador calificó como 'un problema' la situación ya que 'un apagón de la energía es un apagón de la economía'.
Retomó el tema de la venta de Isagén y dijo que 'prescindir de este activo no solo priva a la Nación de los dividendos probables que antes formaban parte del presupuesto general de cada año, cerca de 600 mil millones de pesos, pero no sólo es eso, se trata de entregar a particulares el más importante activo estratégico, requerido para garantizar el equilibrio y la sostenibilidad del sistema energético', por lo que concluyó que 'sin equilibrio energético no hay crecimiento económico, ni sostenibilidad del modelo de desarrollo'.