BOGOTÁ. El juez 29 de Conocimiento de Bogotá condenó a cinco años y cinco meses de casa por cárcel a Mariela Contreras Cruz, su hija Zully Herrera Contreras y su yerno Argemiro Arévalo Romero, luego de que la Fiscalía los señalara de 'engañar a las autoridades para lograr una millonaria indemnización del Estado en el proceso por la masacre de Mapiripán, Meta'.
Las denominadas 'falsas víctimas' fueron sentenciadas como autores de los delitos de fraude procesal y estafa, por acreditarse como víctimas de los hechos perpetrados entre el 15 y 20 de julio de 1998, y haber recibido más de 3.300 millones de pesos como indemnización.
Además, se ordenó el pago de una multa de 225 salarios mímimos legales mensuales vigentes por parte de los condenados, a quienes se les concedió la detención domiciliaria en Villavicencio, debido a que aceptaron su responsabilidad en los hechos y reintegraron parte del dinero recibido.
La Corte Interamericana de Derechos Humanos, Corte IDH, condenó al Estado colombiano en 2005 por los nexos entre uniformados y paramilitares que habrían facilitado la ocurrencia de esta masacre que dejó un número no determinado de víctimas.