El presidente Juan Manuel Santos rindió ayer un homenaje a los miembros de la fuerza pública que han muerto o terminado con lesiones graves en combates.
El mandatario subrayó que los soldados y policías caídos en cumplimiento de su deber –así como sus familia– también son víctimas del conflicto armado.
'Hoy hemos querido rendirles homenaje, reconocerlos, visibilizarlos aquí en este monumento que nos recuerda a nuestros héroes caídos en combate, caídos en acción', afirmó el Presidente, en el acto que se desarrolló en la Plaza de los Héroes Caídos en Acción del Centro Administrativo Nacional (CAN).
Santos indicó que desde el año 2003 han perdido la vida en cumplimiento de su deber más de 6.000 integrantes de la Fuerza Pública, mientras que otros 26.000 han resultado heridos, algunos de ellos con lesiones permanentes.
