El exdirector de Medicina Legal, Máximo Duque, quien figura como nuevo testigo de la defensa de Jonathan Vega, el señalado autor del ataque con ácido que recibió Natalia Ponce de León, mostró exámenes médicos que indicarían que Vega sufre de esquizofrenia, por el consumo desmedido de droga.
'Desde temprana edad, a los 12 años aproximadamente, el joven empezó a consumir alcohol y a los 16 empezó a consumir cocaína. Entre los 17 y 20 años empezó a consumir otras sustancias entre las cuales están marihuana, LSD, heroína y metadona', leyó Duque en el desarrollo del juicio contra el agresor .
En ese orden de ideas, Duque aseveró que el día en que Vega agredió a Ponce, estaba bajo los efectos de la drogas y explicó, 'Con respecto al día de los hechos, el paciente manifiesta que ese día consumió heroína, estaba presentando alucinaciones fuertes con varias personas, incluyendo a Natalia Ponce de León, pensaba que debía quitarse el resentimiento y daño que le hizo durante tantos años, debía sacarse el espíritu de ella o sus voces. Si se quitaba las voces de ella, los demás se retirarían'.
De comprobarse la veracidad del dictamen que indica que Vega sería esquizofrénico, el agresor podría ser declarado inimputable.
La audiencia se cumple en los juzgados de Paloquemao, donde Vega responde por el delito de lesiones personales y se estima que la Fiscalía pida una condena de 35 años en su contra.
Natalia Ponce no comparte el diagnóstico
Luego de la intervención de la defensa de Jonathan Vega Chávez, Natalia Ponce de León rechazó el diagnostico presentado al afirmar que existen pruebas suficientes para demostrar que el agresor planeó minuciosamente el ataque con ácido que desfiguró su rostro, por lo que considera que no se le puede otorgar el papel de inimputabilidad, ya que Vega actuó conscientemente para ocasionar el daño generado.
'Una persona que planea todo con tanta perfección no es esquizofrénica', aseguró Ponce de León sobre el dictamen y añadió: 'yo no quiero ninguna excusa, lo único que quiero es justicia'.
