La Defensoría del Pueblo confirmó ayer que el proceso de deportación de migrantes que adelanta el Gobierno Nacional en Turbo, Antioquia, se lleva a cabo con total normalidad.
'En medio de las dificultades propias de lo que significa la deportación del gran número de inmigrantes irregulares que han permanecido durante las últimas semanas en Turbo, se ha podido constatar que los procedimientos se vienen llevando a cabo con apego a la normatividad vigente', indicó la entidad en un comunicado.
El Gobierno deportó ayer un primer grupo de cubanos que permanecían hacinados, del que hacen parte 14 personas que salieron rumbo a la isla en un avión de la Fuerza Aérea.
'Los 14 ciudadanos cubanos encontrados en permanencia irregular en hoteles del municipio de Turbo fueron deportados a su país de origen', confirmó el director general de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento.
El país está desbordado por una avalancha de inmigrantes ilegales, en su mayoría cubanos y haitianos, que en su tránsito hacia Estados Unidos atraviesan varios departamentos del Pacífico en dirección a la inhóspita selva del Darién para llegar a Panamá, cuya frontera fue cerrada hace casi tres meses.
El pasado 28 de julio la Defensoría contabilizó 1.273 personas, entre ellas 260 menores de edad, a hacinadas en una bodega de Turbo, cifra mucho más conservadora que los 3.000 inmigrantes calculados por la Alcaldía local, que declaró la calamidad pública en esa población de unos 163.000 habitantes.
De acuerdo con el información suministrada por el organismo, 'en la última semana han acudido a las Oficinas de Migración Colombia en Turbo 323 cubanos que solicitaron la deportación voluntaria'.
A estas personas las autoridades les otorgaron salvoconductos para que en un plazo de cinco días puedan salir por cualquier frontera del país.
La Defensoría constató asimismo la salida de 65 haitianos y 49 cubanos por el muelle de Turbo.