Nidal Waked, empresario barranquillero que fue capturado el pasado 5 de mayo por la Agencia Antidrogas (DEA) de Estados Unidos, y que es considerado 'uno de los mayores lavadores de dineros ilícitos y facilitadores del crimen en el mundo', negó en una entrevista publicada ayer los cargos en su contra y descartó negociar con la DEA.
'Yo no tengo nada que negociar, porque yo no he hecho nada. Yo quiero llegar allá (EEUU) para que me presenten las pruebas y poder defenderme de una vez por todas', afirmó Waked en entrevista con el diario El Tiempo.
Asimismo, el empresario de 44 años sostuvo que no tiene nada que ver con los negocios de su tío, y dice estar seguro de que podrá demostrar su inocencia.
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'Nunca he tenido ningún negocio con mi tío Abdul Waked, nunca hemos tenido ningún negocio juntos para nada. El negocio de él, como ustedes saben, es el de la perfumería, de cosméticos, de artículos finos de marca, con locales en los aeropuertos. El negocio mío y el de mi familia es el de electrodomésticos, artículos para el hogar como televisores y demás', manifestó.
El empresario, propietario de al menos 68 compañías entre ellas bancos, hoteles y centros comerciales, negó los señalamientos de tener vínculos con narcotraficantes al alegar que se dedicaba a la gerencia general de una empresa 'que vendía mercadería y recibía pago por dicha mercadería'.
Entre las empresas de los Waked que figuran en la lista negra de EEUU están las firmas inmobiliaria y de objetos de lujo Grupo Wisa y los almacenes La Riviera, el banco Balboa Bank and Trust y dos periódicos en Panamá.
