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De acuerdo con la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo y Desastres (UNGRD), las lluvias registradas del primero al 11 noviembre han golpeado a 17 departamentos del país, dejando un saldo de 16 viviendas afectadas, 5.869 familias damnificadas, 12 muertos y tres heridos, así como daños en dos puentes vehiculares y en 25 vías.

Magdalena y Antioquía son los departamentos con más municipios afectados, el primero con siete y el segundo con seis. El más grave acontecimiento ocurrió en Cauca, donde 10 personas quedaron sepultadas, la caer un alud sobre una vía en el municipio El Tambo. Ocho de las 10 víctimas se movilizaban en un vehículo en el momento del accidente.

Seis de los 125 municipios antioqueños están el alerta naranja y 24, en amarilla, debido a los posibles deslizamientos de tierra. A esto se le suma que –paradójicamente– Abejorral, Apartadó y Turbo también están en alerta amarilla, pero por incendios forestales.

Las regiones que podrían resultar mayormente afectadas por los fenómenos climáticos –según el Departamento Administrativo del Sistema de Prevención, Atención y Recuperación de Desastres de la Gobernación de Antioquia (Dapard)– son el bajo Cauca, Urabá (especialmente en el Atrato medio), norte y occidente.

El director del Dapard, Mauricio Parodi Díaz, señaló que permanece la posibilidad de que se den crecientes súbitas en los ríos de alta montaña, razón por la cual pidió a los consejos municipales de Gestión del Riesgo de Desastres realizar seguimiento a los niveles de los ríos Nechí, Tarazá, San Juan, San José, Tenche y El Bagre.

Limpieza de arroyos en el Atlántico

En cuanto a la Región Caribe, el subsecretario para la Gestión del Riesgo y de Desastres del Atlántico, Edinson Palma, explicó que se están realizando labores de limpieza de arroyos en los 22 municipios del departamento.

Palma advirtió que se debe estar al pendiente de las ciénagas sedimentadas que están ubicadas en las zonas costeras, tanto del centro como del sur del Atlántico.

'No obstante, los dragados, el Incoder no les ha prestado atención a los canales, lo que pondrá en un gran riesgo a la zona rural por inundaciones que pueden afectar a animales, cultivo y puentes que están a punto de colapsar', manifestó Palma.

El funcionario añadió que, a pesar de que se ha logrado un avance en cuanto a obras de protección de los puntos críticos del canal del Dique, el tema sigue siendo preocupante en caso de que sigan cayendo fuertes y constantes lluvias.

Según Palma, los municipios de Tubará, Piojó y Manatí, en el norte, y Suan, Repelón, Candelaria y Santa Lucía, en el cono sur del departamento, son los que se encuentran en riesgo de sufrir por deslizamientos de tierra.

En Bogotá

Un promedio de 80 casos de afectaciones por fuertes lluvias son reportados diariamente al Cuerpo de Bomberos, en la capital del país.

Los reportes, en su mayoría, tienen que ver con accidentes de tránsito, caída de árboles (más de 400 casos) y con encharcamientos. Un total de 38 eventos fueron atendidos, en solo dos días, por el Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (Idiger).

Las localidades de Bogotá que más se han visto afectadas por la constante lluvia son Ciudad Bolívar, Kennedy y Suba, mientras que en Bosa y San Cristóbal se han registrado la mayor afectación humana.

La gran saturación en los sistemas de alcantarillados, producto de los residuos sólidos y basuras, es la causa de los colapsos que se han registrado hasta el momento en la capital.

Por otro lado, Anelfi Balaguera, director del comité departamental para la Gestión del Riesgo y de Desastres de Norte de Santander (CGRD), manifestó que han sido 'alarmantes' los hechos que han ocurrido en el departamento, los cuales –dijo– han sido controlados y atendidos, sobre todo los casos relacionados con las vías, que han requerido el apoyo de maquinaria pesada.

El funcionario explicó que, debido a las recientes lluvias, algunas vías presentan restricciones para la movilidad, tal y como ocurre con La Soberanía, la cual comunica esa región con el departamento de Arauca. Igualmente, la caída de rocas y deslizamientos han ocasionado algunos daños en la vía que conduce al municipio de Chinácota, en el sector El Piñal.

En la capital del departamento (Cúcuta) los aguaceros de las últimas noches también han dejado sus rastros. Calles y avenidas inundadas, en ocasiones por el taponamiento de alcantarillas, es lo por lo que han tenido que padecer los cucuteños.

El CGRD, teniendo en cuenta las calamidades que se han registrado en las vías, hizo un llamado a la ciudadanía y recomendó conducir con precaución cuando esté lloviendo, así como tener presentes las recomendaciones de quienes se encuentren atendiendo alguna eventualidad en los corredores viales.

'La temporada de lluvias, según el Ideam, va hasta la primera semana de diciembre; esto indica que aún nos resta prácticamente un mes, por lo que esperamos que este tiempo no tengamos más afectaciones', señaló Balaguera.