En este país en el que todos los días parece el Día de los Inocentes —pero donde no hay culpables, ya sea por ‘persecución política’, por ‘borracho’ o porque ‘son los sapos que hay que tragarse con la paz’—, el Día de los Inocentes es casi una perogrullada.
No obstante, en aras del absurdo, de la hilaridad y de lo, en últimas, ordinario en Colombia, es decir, en Macondo, se puede enumerar lo ocurrido durante el 2016.
Los borrachos siempre dicen la verdad, ¿Sí o No?