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Francisco y Catalina Uribe Noguera no aceptaron ayer el cargo de favorecimiento de homicidio de la pequeña Yuliana Samboní, secuestrada, torturada, violada y asesinada presuntamente por su hermano, Rafael Uribe Noguera.

Sorprendió que en la audiencia de imputación, que se cumplió desde las 6 hasta las 9 de la mañana de ayer ante el juez 65 de garantías de la capital, la Fiscalía no pidiera medida de aseguramiento ni restricción para salir del país contra los hermanos.

El Ministerio Público apeló la decisión del organismo acusador de no pedir al menos medidas cautelares de restricción para ir al extranjero y un juez de segunda instancia definirá el asunto.

Ante ello, además, el fiscal general Néstor Humberto Martínez relevó a la fiscal del caso ayer mismo y pidió una investigación en su contra en la Judicatura, pues en un comité previo se había decidido lo contrario.

Al respecto, la vicefiscal María Paulina Riveros dijo en rueda de prensa horas después de la audiencia que 'el lunes 26 de diciembre convoqué un comité técnico jurídico con el objeto de analizar y decidir sobre los términos de la imputación que se haría frente a personas eventualmente involucradas en conductas de favorecimiento u ocultamiento de material probatorio, por los hechos que el país conoce, para que la fiscal de conocimiento reflejara en la audiencia que hoy (ayer) se celebró la posición institucional de la Fiscalía General de la Nación, en virtud del principio constitucional de unidad de gestión'.

Y advirtió que 'el decreto ley 016 de 2014 y la Resolución 258 de 2015 disponen que ‘una vez el comité se pronuncie respecto a la decisión, la misma será obligatoria y deberá ser adoptada por el fiscal del caso en los términos establecidos en el decreto ley 016 de 2014’'.

Ante lo que el fiscal general relevó a la fiscal 121 de Vida, Adriana Bottina, y nombró a María Lorenza del Castillo, fiscal especializada del despacho de la Vicefiscal General de la Nación.

Los Uribe Noguera llegaron pasadas las 5 de la mañana para evitar a los medios de comunicación y salieron luego de unas tres horas de la diligencia.

Luego de no acogerse a sentencia anticipada, lo que les hubiera significado a ambos una rebaja del 50 por ciento de la pena perdieron los imputados ese beneficio.

Entre las pruebas que exhibió la fiscal del caso se contaron varios informes de investigadores de los EEUU, que evidenciarían que las versiones que dieron los fraternos no coincidirían con los hechos y, además, que emprendieron aparentemente una serie de acciones distractoras para entorpecer las labores de las autoridades.

Para la Fiscalía, los imputados habrían torpedeado la acción de los investigadores que buscaban a la pequeña de 7 años y ambos sabían que la niña estaba en el apartamento de su hermano.

Puso de presente además el investigador los hechos como ocurrieron el domingo 4 de diciembre: el Gaula contactó a Francisco Uribe hacia el mediodía y le dijeron que en una camioneta a su nombre habían secuestrado a la menor horas antes.

Luego de dos horas, Uribe les dijo a los agentes antisecuestro que la camioneta la tenía su hermano, Rafael. Y no fue sino hasta las 7 de la noche cuando, supuestamente en el taxi en que llevaba a su hermano a la clínica, les dijo a los uniformados que Rafael le había confesado lo ocurrido.

Sin embargo, en el registro del edificio Equus 66, donde fue hallado el cadáver de la pequeña, aparece que tanto Francisco como Catalina ingresaron al apartamento 603, donde ocurrieron los hechos, hacia las 3 de la tarde.

Además, los Uribe Noguera les habrían dicho a los agentes que encontraron a su hermano bajo el influjo de las drogas y el alcohol. No obstante, Medicina Legal estableció que el consumo de cocaína y aguardiente habría ocurrido luego de perpetrados los hechos. Lo que podría asumirse como un intento para evitar la judicialización de Rafael Uribe Noguera.

De igual forma, pesa entre las evidencias el análisis de las llamadas que habrían hecho Francisco Uribe y la arquitecta Catalina Uribe, al parecer, a abogados para comentarles el caso de su hermano. Igualmente, se estudiaron los desplazamientos que hicieron ese día y que no encajan con sus versiones.