Luego de que la Fiscalía los hubiese citado para declarar por el secuestro, tortura, violación y asesinato de la pequeña Yuliana Samboní, los padres del confesó agresor, Rafael Uribe Noguera, le pusieron de presente al ente investigador su derecho a guardar silencio.
A través de una misiva, Rafael Uribe Rivera y la samaria María Isabel Noguera, se acogieron a su derecho a guardar silencio por el grado de consanguinidad que tienen con sus hijos, el detenido Rafael y con los imputados por presunto favorecimiento, Francisco y Catalina.
El organismo de control penal intenta establecer si los padres Uribe Noguera tuvieron participación y/o información de lo ocurrido en pasado 4 de diciembre en el apartamento Equus 64, donde el agresor llevó primero a la indefensa niña de 7 años, y/o en la vivienda 603 del Equus 66, donde fue hallado el cadáver de la pequeña con aparentes maniobras de alteración de la escena del crimen.
De acuerdo a su abogado, Pedro Aguilar León -también defensor en el sonado caso Colmenares-, 'además de ser los padres de la persona que está encarcelada, son los padres de dos personas que están imputadas en este momento. Entonces con cualquier manifestación pueden autoincriminarlos'.
Agregó el jurista al noticiero televisivo 'CM&' que 'en este caso el vínculo de consanguinidad, afinidad o grado civil está protegido por la ley para que las personas tomen la decisión de no declarar en un proceso o investigación. Ese ejercicio es un derecho que tienen todas las personas'.
Al parecer, el poderoso matrimonio Uribe Noguera fue el primer respondiente cuando el Gaula buscaba la camioneta en poder de Rafael y de propiedad de Francisco en que secuestraron a la menor en el deprimido barrio Bosque Calderón, de Bogotá.
Rafael, preso desde el 7 de diciembre pasado en un patio especial de La Picota, será acusado el próximo miércoles 11 de enero por los delitos de feminicidio agravado, secuestro simple y acceso carnal abusivo agravado. Uribe Noguera confesó ante la Fiscalía y se espera que haga lo propio ante el estrado.
Francisco y Catalina fueron imputados de favorecimiento de secuestro y cobijados con medida de aseguramiento consistente en restricción para salir del país. Se evalúa la posibilidad de señalarlos además por el punible de encubrimiento, por las posibles maniobras de alteración de la escena de los vejámenes y el asesinato de Yuliana.
Casa para los Samboní
El gestor social del programa 'Fe en Colombia' del Ejército, Jesús Montaño, le ofreció a Juvencio Samboní y Nelly Muñoz, los padres de Yuliana, un lote en zona rural de Popayán, mientras que la Policía del Cauca lidera una iniciativa para recolectar recursos y construirles una casa a la familia víctima.
Los Samboní, quienes se encuentran en el corregimiento Los Milagros, en jurisdicción de Bolívar, Cauca -donde vivían antes de mudarse a Bogotá-, aún no han decidido si van a aceptar las donaciones.
De hecho, la Policía también le ha ofrecido un empleo al padre, quien se llevó a su familia a la capital buscando mejores oportunidades.
Por ahora, la familia caucana no sale del estupor y del dolor de lo ocurrido con su pequeña, y por eso, aunque agradecen la reacción del pueblo colombiano, en estos momentos parecieran concentrados en clamar justicia.
