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El exmagistrado Enrique Gil Botero –quien se desempeñó como presidente del Consejo de Estado y actualmente es miembro de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA– fue designado este viernes por el presidente Juan Manuel Santos como el nuevo ministro de Justicia.

'Me alegra poder decir que el nuevo Ministro de Justicia será el doctor Enrique Gil Botero, un jurista con las mejores credenciales', dijo el jefe de Estado al anunciar al nuevo titular de la cartera, quien será el encargado de remplazar a Eduardo Londoño.

Gil Botero es oriundo de Antioquia. Se graduó de derecho en la Universidad de Antioquia y cursó sus especializaciones en derecho administrativo en la Universidad Pontificia Bolivariana y en derecho constitucional en la Universidad de Salamanca.

Gil Botero es oriundo de Antioquia. Se graduó de derecho en la Universidad de Antioquia y cursó sus especializaciones en derecho administrativo en la Universidad Pontificia Bolivariana y en derecho constitucional en la Universidad de Salamanca.

'Estoy seguro de que, con su aporte, la justicia colombiana seguirá consolidándose como la mejor aliada de los derechos de los colombianos, comenzando por ese derecho supremo, el más sublime de toda sociedad, que es el derecho a la paz', sostuvo el Presidente Santos durante la presentación de las bases del Plan Decenal de Justicia.

Durante el evento, que se desarrolló en la Casa de Nariño, el mandatario colombiano aprovechó para manifestar que, precisamente, concretar y sacar adelante el Plan Decenal de Justicia es, entre otras, responsabilidad del nuevo ministro de Justicia.

Gratitud hacia Londoño

En este mismo acto, Santos expresó el agradecimiento, 'de todo corazón', al ministro de Justicia saliente, Jorge Eduardo Londoño, quien –recalcó– termina su labor al frente de la cartera después de casi un año de buen servicio al país.

El gobernante colombiano, además, resaltó que Londoño deja, entre otros legados, la Ley de Pequeñas Causas, sancionada el mes pasado, así como una labor pedagógica y de defensa, con férrea convicción de la Justicia Especial para la Paz, 'se modelo innovador de justicia transicional al que le queda un solo debate en el Congreso para convertirse en reforma constitucional'.

Expresó sus buenos deseos para Londoño y dijo que espera que 'vuelva al Congreso para que desde allí siga defendiendo la paz y ayudándonos a afrontar con éxito los inmensos retos del posconflicto'.