La Corte Suprema de Justicia anuló una prueba que había sido presentada contra la exsenadora Piedad Zuccardi dentro de la investigación que adelanta la misma corporación por sus supuestos nexos con el paramilitarismo.
Se trata de unas interceptaciones de llamadas telefónicas que el alto tribunal tenía en su poder y que obedecen a conversaciones entre Zuccardi y sus abogados entre abril y mayo de 2013.
En su momento, tal como lo publicó el periódico El Tiempo, la Corte dijo que las interceptaciones fueron legítimas porque allí se escuchaba cómo supuestamente Zuccardi y su defensa pretendían la comisión del delito de falsa denuncia, 'ya que planeaban algunas estrategias, como denunciar a dos investigadoras de policía judicial por presión a los testigos'.
La defensa de Zuccardi, libre desde abril del año pasado tras completar tres años detenida sin que iniciara el juicio, fue quien solicitó la anulación de las interceptaciones.
Al estudiar el caso, los nueve magistrados de la Corte decidieron excluir esa prueba al considerar que interferir en la confidencialidad de la defensa de Zuccardi 'no satisface el objetivo de mantener la funcionalidad de la administración de justicia', pues se trata de hechos que no hicieron parte de la acusación por ‘parapolítica’. En este caso, la Corte dice que esas interceptaciones son ilegales 'porque se practicaron desconociendo sus derechos'.
