Para celebrar el Día de la Madre, el Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana, publicó un informe que revela las ocho competencias laborales que practican las mamás en casa y que parecen, para algunos, invisibles.
Se calcula, según datos del Dane, que en el país actualmente hay 22 millones de mujeres, de las cuales el 56 % son madres cabezas de familia y menos de la mitad, el 41,9 %, tiene alguna ocupación laboral fuera del hogar.
Los datos también muestran que el 33,2 % de los trabajadores en el sector de servicios sociales, comunales o personales son mujeres. El 31,4 % en el de comercio, hoteles y turismo; y el 14,8 % en la industria manufacturera.
Pero no sólo preocupa la cantidad de mujeres que son madres cabeza de familia en Colombia, el informe también advierte la situación crítica de desventaja a nivel laboral que tienen ellas en comparación con los hombres.
Estudios de la Organización Internacional del Trabajo, el Banco Mundial y la Cepal, que fueron analizados en el informe, revelan que la jornada de trabajo de las mujeres en labores remuneradas y no remuneradas es mayor que la de los hombres; que la distribución de las tareas domésticas sigue siendo desigual debido a que el tiempo remunerado de ellas se ve recargado por atender el cuidado de los hijos pequeños, enfermos o adultos mayores, y éste es en promedio inferior al de los hombres que tiende a permanecer siempre estable.
Según este panorama, está claro que las mujeres que son madres no están compitiendo en igualdad de condiciones con los hombres en el mundo laboral, lo que no quiere decir que no puedan ser más eficientes o productivas, incluso así estén dedicadas, de manera parcial o permanente, al hogar.
Es por esta razón que el Instituto de la Familia de la Universidad de La Sabana, definió las ocho competencias laborales que realizan las mamás en casa y que podrían ser mejor valoradas en el mercado laboral.
1. Piensan y actúan en función de las necesidades de su familia, lo que se traduce en una empresa como 'orientación y servicio al cliente'.
2. Por su trabajo en el hogar son un referente a seguir por parte de los miembros de la familia, lo que viene a ser 'liderazgo organizacional'.
3. Se ganan la confianza de los hijos y esposo gracias a su coherencia entre lo que dicen y piensan, validando su 'integridad y lealtad'.
4. Para atender las necesidades de toda la familia, en especial la alta demanda que exigen los recién nacidos o niños pequeños en cuestión de tiempo, esfuerzo y dedicación, generan gran capacidad de 'eficiencia laboral'.
5. Son capaces de organizar a los hijos y esposo, según las capacidades de cada uno, desarrollando así la competencia de 'trabajo en equipo'.
6. Terminan aprendiendo a escuchar y a tener empatía, gracias a su capacidad de 'comunicación'.