El Departamento para la Prosperidad Social, DPS, lleva en sus hombros el peso del éxito o del fracaso de la política de la inclusión social en el país. Y la cara más dolorosa de la exclusión, de la pobreza, de la inequidad en Colombia la tiene, en estos momentos, La Guajira. Cada niño que muere en la península por causas asociadas a la desnutrición es un golpe que ensordece cualquier aplauso que se pudiera prodigar a sí misma esta Nación. De manera que no es gratis que la dirección del DPS esté a cargo de un guajiro desde la semana pasada.
Nemesio Roys, un ingeniero industrial con posgrados en administración de negocios, negociación estratégica y gerencia de recursos humanos, quien fuera coordinador de la Estrategia Regional Anticorrupción de la Presidencia y subdirector del mismo DPS, candidato a la alcaldía de Riohacha por La U y los conservadores en la pasada elección, hijo de la dos veces alcaldesa de la capital guajira Carmen Garzón, dio su primera entrevista como director de esta entidad a EL HERALDO, para hablar de La Guajira, de Chocó, de Buenaventura y del posconflicto.
EL DPS, con cerca de 2,5 billones de presupuesto y con capacidad para contratar en todo el territorio nacional, es un reconocido fortín burocrático para parlamentarios o, como la oposición prefiere llamarlo, un gran recipiente de 'mermelada', pero también tiene a su cargo celebrados programas como 'Más Familias en Acción' y la posibilidad de acometer los más sensibles asuntos sociales y de reconciliación nacional.