La Juez 40 de control de Garantías legalizó la captura del expresidente de la Corte Suprema de Justicia Francisco Ricaurte, por su presunta participación en el escándalo de corrupción y compraventa de decisiones judiciales.
La Juez no validó los argumentos del defensor suplente de Ricaurte, quien alegó que no se cumplía el objetivo de la orden de captura, que era para comparecencia en el proceso, porque cuando se supo que había una petición de detención, Ricaurte se presentó al búnker de la Fiscalía.
'De manera formal y material, esta detención del ciudadano se ajusta a los parámetros legales y constitucionales. Está precedida por una orden de captura y se materializaron los derechos y garantías fundamentales', dijo.
De acuerdo con la Juez, ella no es quien para rebatir la orden que dio el juzgado segundo de garantías, ante quien la Fiscalía pidió la detención. Además, indicó que sí tiene competencia para llevar este caso, porque fue la propia Corte Suprema de Justicia la que alegó que los hechos no se cometieron en razón de su fuero.
No obstante, la juez compulsó copias penales y disciplinarias para establecer por qué y cómo los medios se enteraron de la orden de captura.
De acuerdo con la defensa de Ricaurte, la presencia de este en el búnker antes de que se emitiera formalmente la orden de detención, eliminó los motivos y la necesidad de la misma.
Ricaurte llegó sobre las 3:15 a los Juzgados fuertemente escoltado. 'Soy inocente', afirmó y aseguró que el exfiscal Luis Gustavo Moreno es un falso testigo.
'Moreno es un falso. Es un mentiroso', señaló Ricaurte, quien aseguró que 'nunca sucedió' el episodio que narró Moreno ante la Corte, de entrega de 550 millones de pesos, de los 700 que le entregó Luis Ignacio Lyons.
A Ricaurte le imputarán los delitos de concierto para delinquir agravado, uso abusivo de información privilegiada, tráfico de influencias y cohecho.