Ayer se conoció que ocho generales del Ejército Nacional radicaron su carta de renuncia ante la secretaria del Ministerio de Defensa, luego del nombramiento del general Alberto José Mejía Ferrero, quien será el nuevo comandante de las Fuerzas Militares.
De acuerdo con fuentes oficiales del Ministerio, las renuncias de los uniformados obedecen a la línea de mando que tiene el Ejército. Según el reporte oficial, el general Mejía cuenta con más de 36 años dentro de la institución, mientras que algunos de los que renunciaron tienen más de 38 años en su cargo.
Pese a los señalamientos, en la tarde de ayer, el presidente de la República, Juan Manuel Santos, en medio de la ceremonia de ascenso de suboficiales de la Policía, resaltó nuevamente la labor del general Mejía dentro de la institución, que inició desde hace 40 años en la Escuela Militar José María Córdova.
'Desde entonces ha sido un oficial de nuestro Ejército a carta cabal. Fue primer puesto en el curso de Rangers, fue director de la Escuela de Lanceros, fue comandante del Comando Conjunto de Operaciones Especiales. Es un oficial que combina, muy bien, su disciplina, su estudio con su amor a la institución, a su patria y con su lealtad', afirmó el primer mandatario.
Los generales que solicitaron apartarse de su cargo son Juan Carlos Salazar, jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Militares; el general Carlos Rojas Tirado, comandante del Comando Estratégico de Transición; el general Leonardo Pinto, jefe de Estado Mayor Generador de Fuerza en el Comando del Ejército; el general Jorge Suárez, comandante del Comando Conjunto No.3.; y el general Jorge Humberto Jerez, comandante de la Fuerza de Tarea Conjunta Omega.
La lista la completan los generales Marcolino Tamayo, jefe de la Subjefatura de Estado Mayor Conjunto Administrativo; Martín Nieto, jefe del Comando de Inteligencia; y Mauricio Zúñiga, jefe de Inteligencia del Ejército.