La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia abrió la puerta para que los congresistas y todos los aforados que investiga puedan recibir beneficios judiciales a cambio de información clave y efectiva.
Se trata de un giro de la Corte que se analizó por primera vez en el caso del senador Musa Besaile, quien está siendo procesado por su responsabilidad en el Cartel de la Toga por pagar 2000 millones de pesos para frenar un proceso por 'parapolítica'.
El giro de la Sala Penal consiste en que en el marco de la colaboración eficaz se pueda dar aplicación, por favorabilidad, a un principio de oportunidad, que es un mecanismo que no existe en la ley que se aplica para procesar a congresistas (la Ley 600 del año 2000).
En ese sentido, la Corte podría llegar a no continuar con las investigaciones contra delitos menores en un proceso contra un congresista, tras evaluar si la información que este entregue es pertinente y eficaz. No obstante, esto solo podría suceder a petición del procesado y su ocurrencia depende del estricto análisis de la Corte.
De esta forma, Besaile se convierte en el primer senador procesado por el Cartel de la Toga que 'prendería el ventilador' ante la Corte.
