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El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), señaló que el fenómeno de La Niña esta vez será más corto y tendrá características más débiles en comparación con el presentado en 2010, cuando las lluvias destruyeron más de 277.000 viviendas y causaron la muerte a cerca de 200 personas en el territorio nacional.

Luis Alfonso López, meteorólogo de la oficina de pronósticos y alertas del Ideam, señaló que este fenómeno es una condición natural que no tienen una periodicidad marcada, pero se presenta cuando se cumple con dos condiciones: un enfriamiento de las aguas del Océano Pacífico Tropical y el fortalecimiento de los vientos del este.

López afirmó que en esta temporada se espera que su impacto no sea significativo en zonas de la costa Caribe, así como en buena parte de los departamentos andinos, pero esto dependerá de 'la presencia de otros sistemas meteorológicos que sumen, para que puedan presentarse eventualmente lluvias que puedan considerarse fuertes'.

En esta ocasión los expertos afirmaron que la intensidad de ‘La Niña’ será débil y de corta duración. De hecho, aunque este evento climático suele asociarse a fuertes lluvias, resaltan que es posible que no se generen precipitaciones continuas ni intensas.

De acuerdo con el Ideam, el impacto de este fenómeno en el país dependerá, esencialmente, del grado de vulnerabilidad de cada zona que estará asociado a la segunda temporada de lluvias. Lo más probable es que en la región Pacífica se presenten precipitaciones. Las más fuertes, quizás, ocurran en Chocó.

El fenómeno anunciado para este año, de acuerdo con el Ideam, se encuentra en una fase de desarrollo con intensidad débil, el cual ya lleva tres meses, por lo que todavía el organismo climatológico no tiene índices de que pueda suceder en términos de la condición del océano Pacífico para mediados del año.

López explicó que para la consolidación del fenómeno de ‘La Niña’ se debería esperar hasta que se cumplan los cinco meses, que darían un resultado en la anomalía para consolidarlo. Hasta ahora se contarían cuatro meses, ya que se cuenta su inicio desde el mes de octubre de 2017.

El 2010

La llegada de ‘La Niña’ suele ser una noticia preocupante. Colombia tiene antecedentes muy difíciles de su paso por el país. Uno de los peores se presentó en 2010, con impactos climáticos que se extendieron hasta 2012 y dejaron una verdadera crisis económica y social.

El país registró más de tres millones de personas perjudicadas por el fenómeno climatológico en esa ocasión y el 42 % de las afectaciones se presentaron en seis departamentos (Bolívar, Magdalena, Cauca, Córdoba, Nariño y Chocó), según explicó López, al citar un estudio de la Cepal y el DNP.

'El 58,5 % de los bienes afectados fueron viviendas y el 33 % fincas o parcelas. Regiones como el Canal del Dique, La Mojana y la Depresión Momposina vivieron fuertes inundaciones. El total de daños en ese estudio alcanzaba 11,2 billones de pesos, equivalentes a 6052 millones de dólares', dijo.

En ese sentido, el experto sostiene que ese fenómeno dejó en evidencia 'la extrema vulnerabilidad del país a la variabilidad climática y a estos fenómenos (La Niña y El Niño). Espero que la gran lección que nos haya quedado de sus impactos sea la necesidad de enfocar los mayores esfuerzos en la prevención. Aunque no es un fenómeno que se pueda prever en su totalidad, Colombia tiene que estar preparada'.

Este fenómeno no puede ser mitigado o minimizado, 'pero sí podemos estar atentos, ya tenemos una perspectiva de lo que pueda suceder con la precipitación para tomar medidas preventivas en niveles de ríos y deslizamientos, también en cultivos y en afectaciones de salud'.

Heladas no se asocian a La Niña

Luis Alfonso López explicó que las heladas no necesariamente están ligadas al fenómeno de La Niña o El Niño. 'Básicamente este tema consiste en el día a día de disminución de la nubosidad en el transcurso de las horas del día e incrementos en las temperaturas máximas superiores a los 20 y 22 grados Celsius y condición de humedad relativa muy baja en el transcurso de la madrugada', dijo.

Adicionalmente, López señaló que generalmente las épocas en las que es normal encontrar ocurrencia de heladas en zonas de alta montaña, como el Antiplano Cundiboyacente, Antioquia o Nariño, son a comienzo de año, especialmente el mes de febrero, como periodo más recurrente.

'Una de las características particulares para determinar la ocurrencia de una helada es que el registro de la temperatura mínima en una estación convencional sea de 0 grados o menor a 0 grados, si en ese punto tenemos un registro de 0.1 grados técnicamente no hay una helada a pesar de que la superficie este muy cerca del punto de congelación', resaltó el experto.