Una canoa denominada 'Kusikawsay', que en quechua significa 'vida apacible y venturosa', será el monumento a la paz en la sede de la ONU en Nueva York. La propuesta del artista chileno Mario Opazo, se realizará con armas fundidas de las Farc y fue la ganadora del concurso convocado por el Ministerio de Cultura.
Según explicó el también coordinador Académico de la Maestría en Artes Plásticas de la Universidad Nacional, 'la canoa propuesta para este monumento se basa fundamentalmente en la valoración del material como algo sensible, con una carga simbólica muy fuerte en la apropiación de un objeto arcaico preexistente, que está presente en las culturas antiguas como el paso de la vida a la muerte'.
Para su elaboración se plantea sustituir la madera, el material de una canoa indígena, y fundirla con el metal de las armas. 'Lo que me interesa es el proceso de diseño y montaje en el espacio, en donde esta forma ancestral apunta hacia el cielo y se comporta como un tótem, que también podría ser un proyectil o un cohete, que surge de la tierra, como una especie de bóveda de concreto en los cementerios, pero en sentido vertical', explica Opazo.
Las dimensiones de esta obra son similares a las de una canoa estándar, que además coincide con las dimensiones sugeridas en el espacio, 4,20 metros, de la superficie hacia arriba.
'Me interesa la mitología, he tenido contacto con trabajos de laboratorio de creación con víctimas del conflicto armado; he vivido mucho el cambio colombiano durante estos tiempos del proceso de paz', relata el docente de la Nacional.
Llegar a la propuesta final le tomó alrededor de mes y medio y se espera que la obra esté terminada entre mayo y junio, para que después de la fundición se pueda llevar en fragmentos a la Sede de la ONU, en Nueva York. Se espera que la obra sea inaugurada en agosto, antes de que termine el actual periodo de Gobierno.
Opazo sostiene que su trayectoria en el proceso que ha vivido Colombia le ha permitido tener una perspectiva más amplia y compleja, que no consiste en una polarización ni en una síntesis de la problemática, sino en el reconocimiento de todas las miradas.
'Cuando una persona no trabaja muy cerca a este asunto tiende a una mirada fácil, polarizada, pero trabajando con comunidades uno se da cuenta de que la noción de víctimas tiene tantos matices que ni siquiera ellas mismas saben cómo asumirla', señala el profesor.
Por su parte la ministra de Cultura, Mariana Garcés, mencionó que 'como se recuerda, en el Acuerdo de Paz se pactó que con las armas que entregaran las Farc se harían tres monumentos, uno en Cuba, uno en Nueva York y otro en Bogotá. Se dispuso igualmente que parte del armamento dejado por ese grupo se destinara para que un artista o un grupo constituido realizara un monumento que será emplazado en el Jardín de Esculturas de la sede de la ONU en Nueva York'.
La funcionaria explicó que se están definiendo el lugar y las características del monumento a la paz de Cuba, en tanto que el de Bogotá estará a cargo de la artista colombiana Doris Salcedo.