El ministro de Justicia, Enrique Gil Botero, explicó que el traslado de 'Jesús Santrich' a la Fundación Caminos de Libertad, entidad manejada por la Conferencia Episcopal, respondió a la atención de un llamado humanitario que realizó la comunidad internacional.
El funcionario expresó que Santrich hace varios días sufrió un desmayo consecuencia de la huelga de hambre que adelanta hace más de un mes, tuvo una baja de glucosa y por la situación invasiva de deshidratación.
'El Estado es respetuoso de los derechos fundamentales de las personas, pero en este caso en particular vemos que, como lo ha pedido la comunidad internacional, el señor director del Inpec, previa comunicación a la Fiscalía, decidió trasladarlo a la Fundación Caminos de Libertad, que es una reclusión, bajo estrictas medidas de seguridad', expresó el ministro.
Gil Botero aclaró que la decisión no corresponde a ningún beneficio carcelario y que en los alrededores de la sede de Caminos de Libertad se instalaron varios anillos de seguridad, que son controlados por el Instituto Nacional Penitenciario (Inpec), La Policía y el Ejército Nacional.
'Sobre esta decisión que tomó el señor director del Inpec, dentro de su competencia, asumo la responsabilidad política como cabeza del sector', enfatizó el funcionario.
Finalmente, el ministro ha supervisado personalmente las instalaciones de Caminos de Libertad, las cuales son austeras y cuyo director es un sacerdote que durante años fue capellán del Inpec, por lo que conoce el manejo de prisioneros.